El técnico del UEMC Real Valladolid Baloncesto, Paco García, confió ayer en que su equipo dé un paso adelante en la visita del HLA Alicante. El preparador blanquivioleta compareció en rueda de prensa antes del encuentro ante los lucentinos y reconoció haber pasado "una semana muy dura" y habló sobre lo que espera de los suyos para responder ante la adversidad.
"No puedo empezar sin tener la tristeza metida en el cuerpo todavía por la noticia del fallecimiento de Sebas en Zaratán. Quiero mandar un abrazo muy grande a la familia. Que muera alguien haciendo deporte es una tragedia, pero si encima tiene 15 años, es absolutamente difícil de digerir y ayer cuando estábamos viendo las noticias se nos caía el alma a los pies en casa. Mandar un muy, muy fuerte abrazo y toda la fuerza que se pueda tener. Entiendo que es un dolor irreparable", comentó sobre el triste suceso ocurrido en Zaratán.
Ya metido de lleno en la trayectoria de su equipo, confesó que estaba siendo una semana tremendamente dura: "Anímicamente hablando no es mi mejor semana. Quiero hablar desde el corazón, soy una persona demasiado transparente, se me nota mucho cuando estoy bien y cuando no estoy ben. Semana muy dura para mí. He tenido sensaciones francamente malas a la vuelta de Orense. Te miras al espejo y te dices que me estoy fallando. He querido ser ambicioso y transmitir eso al equipo desde el minuto uno, por luchar y estar arriba y he sido un osado intrépido, de lo que no me arrepiento. Esa ambición a veces crees que la tienes y no la encuentras. Creo que estoy fallando a los que apostaron por mí para liderar el proyecto porque no he conseguido transmitir esa ambición que tengo para pensar que podíamos estar arriba. Cuando alargamos el contrato para seguir no me apetecía mucho entrenar a un equipo que, bueno, que si perdemos no pasa nada. No soy de esos. Venimos de tres derrotas en cuatro partidos contra tres equipos de la zona media de la tabla, no son de abajo, y vamos a por un playoff al que nos vamos a tener que agarrar. Lo peor en el deporte no es ganar o perder, es un juego, lo peor es cuando no compites. Y esa sensación la he tenido en Oviedo y Orense".
Sensación de culpabilidad
Tremendamente frustrado, señaló que "vamos a un partido, nos meten 35 en el primer cuarto, 99 al final, caemos de 22 y parece que no pasa nada. Eso no me vale. Tengo una sensación de culpabilidad en primer lugar tremenda y no consigo que el equipo sea tan duro defensivamente con las mismas reglas y normas del baloncesto de Paco García y que han hecho que viva de esto. Por momentos sí lo parece, somos capaces de ganar al Estudiantes en su casa, de conseguir buenos resultados, de ir terceros a falta de cinco jornadas de la primera vuelta… se nos cae Mike y en vez de dar un paso adelante, hemos encontrado la excusa. Me duele. Ha sido semana difícil sin Lotanna ni Jaime, uno con un proceso vírico que le ha dejado trillado y no ha entrenado aún a día de hoy, y Jaime con un problema de pubalgia que hay que tomárselo en serio o lo va a ir arrastrando toda la temporada y es una absurdez. Entreno, paro, vuelvo… Mejor parar y que se recupere de cara a lo que queda de segunda vuelta. Me gustaría que los jugadores dieran un paso adelante y demostraran que sí importa ganar y sí importa perder. Me esfuerzo mucho en ello, en el deporte profesional no se vive igual ganando que perdiendo y eso tiene que ser una máxima. Siento en el alma a quien le duela. Yo vivo mucho peor, mi vida personal y profesional a todos los niveles es peor la semana que pierdo. A pesar de los años, no soy capaz de corregirlo. Semana dura, hacía tiempo que no tenía esta sensación y espero que el equipo dé un paso adelante y se dé cuenta. Tenemos una masa social cada día más numerosa a la que le gusta leer que su equipo compite y si pierde es porque otros son mejores. El otro día Orense lo fue, pero nosotros hicimos que fuera así".
Sobre si la plantilla es o no conformista, indicó que cree que "la generación es conformista y eso es lo que va a hacer que yo me retire de esto, no tardando mucho". A su juicio, "hay una diferencia generacional en la que la diferencia de las ambiciones de unos y otros son abismales". "El jugador de hoy sí le da importancia a ganar o perder, quiero pensar que sí, pero no toda la que debería de darle para llegar a una pista y poner todo lo que se debe ganar para competir o ganar. No es la palabra conformismo, es falta de ambición. Creo que nos falta ese punto para que, estando a una victoria del líder, coger el cuchillo en la boca y a por todo, y no nos pasa eso. Bueno, la liga es larga, ya ganaremos el siguiente… lo llevo fatal", apostilló.
Con bajas
¿Qué esperar de cara al encuentro de mañana? "Espero que el equipo dé un paso adelante. Espero. Vamos a tener bajas, pero no jugamos cinco contra cuatro, espero no hacer a otro MVP de la Jornada, que ya creo que van 5 en lo que va de liga. Y viene Brad Davison, que es uno de los buenos anotadores de la liga. Habrá que defenderlo bien, porque si toma la iniciativa y tira fácil como hemos hecho en otros jugadores, tendremos a otro MVP aquí en contra. Alicante es un equipo con un potencial importante en el tiro exterior. Lo hicimos muy bien allí, defendiendo un paso por delante de la raya, intentando que sus tiradores no estén cómodos, sin tiros fáciles como Ourense el otro día, que nos dinamita. Es un buen equipo, va a estar en playoffs seguro, con una plantilla buena, con muy buenos tiradores, un base americano de buen nivel (Harris),otro joven como Adriá que están firmando buenos minutos, potencial interior de primer nivel con Bercy y Kostadinov, muy físicos, que corren el campo muy bien. También Barro, uno de los mejores cincos de la liga y Edu Gatell, un recambio titular. Espero que estemos serios porque si no lo estamos y no nos ponemos en defensa, no habrá mucha más historia por mucho que cambiemos jugadores, de hombre a zona o presión… si no lo aderezas con querer, poder y saber defender, no vamos a ningún sitio. Ganaremos partidos, seguro, y seguro que entramos en playoffs, pero yo quiero un equipo que juegue a ganar cada día".
En cuanto a posibles soluciones en el juego interior, indicó que "los que podamos encontrar, así de claro". "Llevamos 13 jornadas seguidas sin tener al equipo entero. Mañana Jaime va a ser baja definitiva, veremos cómo esta Nwogbo, que hasta ahora sigue sin poder entrenar. Y en contra de mis principios, estará si se encuentra bien, para jugar un rato y dar descanso. Yo no voy a salir a jugar de pívot".
Uno de los puntos débiles del cuadro pucelano es, sin lugar a dudas, la debilidad defensiva y la capacidad de los rivales de castigar en el perímetro: "En el baloncesto profesional, casualidades pocas, creo más en las causalidades. Si nos atacan tan fácil a los bases y escoltas y damos tan poca respuesta, pues… La defensa es buena si el uno contra uno es bueno, si entra el dos contra dos ya tiene que haber una ayuda. Si es malo, tiene una segunda ayuda en el tres contra tres, que ya es la lecha porque son muchos jugadores. Con cuatro o cinco implicados ya hablas de rotaciones y recuperaciones… nos están sacando la ventaja en el uno contra uno primero, poco hay que decir. Estamos trabajando en ello. El uno contra uno es algo que entrenamos cada semana y quizá esta semana más ejercicios incluso, lo hemos intentado. Pero querer, poder y saber defender".
Los detractores del conjunto le achacan que hay una falta de ambición en la plantilla más que patente. A este respecto, lo tiene muy claro: "La plantilla es buena gente, no tengo queja, y entrenamos bien, tampoco tengo queja. Por eso creo que es un tema más generacional. El otro día me contaba un amigo profesor una anécdota. En un examen iba pasando por las filas y mirando cómo iban los alumnos. Se para delante de uno y le dice que va muy bien, que ya tiene el 5 seguro. El chico le mira, firma, le da el examen y marcha. Qué poca ambición. Eso es lo que a veces siento en el equipo. Que con lo que hacemos nos vale, y a mí no me vale".
Liga abierta y acicate para luchar por arriba
"Cuando teníamos a los líderes a una victoria, ahora que se han ido a tres… por más que lo hablas y pones la tabla, a veces tengo la sensación de que voy en quinta queriendo meter la sexta y no consigo que metamos la cuarta. Entrenamos bien, somos buena gente, pero nos falta ese punto de ambición. Podría decir que no estamos tan mal, que tenemos 11 victorias, que estamos en playoffs, que fuera de casa llevamos cinco triunfos, que es un balance positivo… pero yo quiero y necesito más del equipo y necesito que me lo dé. Es verdad que con la baja de Mike Torres nos cae el equipo y es cierto, pero creo en que si se cae una pieza los demás deben dar un paso adelante. No lo hemos hecho, es la realidad y ahí están los números. Necesitamos que alguien asuma el liderazgo de Mike y puede volver a pasar. Me he puesto en primera persona, me miro al espejo y me digo que estoy fallando porque no consigo transmitir lo que yo quiero transmitir. Es lo que siento, soy así", añadió.
En cuanto a si habían dado un paso adelante Sergi Costa y Zigmantavicius en los entrenamientos, su respuesta fue reveladora: "Pasapalabra".