Paulo Pezzolano seguirá como entrenador del Real Valladolid la próxima temporada. Así lo asegura él mismo y así se concluye del silencio de un club que tiene a su presidente deshojando la margarita sobre una posible venta. Mientras, el técnico que ha llevado al Pucela a regresar a Primera habla en público esta semana, pidiendo perdón a la afición asegurando que todo lo que ha hecho era por un objetivo, ascender.

La primera directa. ¿Qué pensó al oír 'Pezzolano, dimisión' al finalizar el partido ante el Villarreal B?

(Se ríe). Lo único que pensaba era en el orgullo. Fue espectacular cómo se dio el partido, cómo los jugadores tuvieron esa rebeldía hasta el último segundo, creer e ir a por el partido...

Pero en su cabeza, escuchar eso...

Sinceramente no le presté atención. Lo escuchaba pero no le prestaba atención, estaba pensando en lo que habíamos conseguido. Era lo valioso en ese momento: una felicidad tremenda y un afloje. Lo conseguimos, saltamos y me fui a sentar al banco diciendo 'no me lo puedo creer, lo conseguimos hoy, que parecía que iba a ser imposible'. Fue alegría, orgullo y agradecido por todo lo que es este club, porque fue gracias a todos.

Se le ha visto en vídeos dando charlas a los jugadores. ¿Qué les dijo nada más terminar el encuentro antes de salir a la celebración?

Hubo palabras sí, de agradecimiento y el aprendizaje de vida que tuvimos este año. Frente a la adversidad, redoblar esfuerzos, y detalles que hablé con ellos y con todo el staff, que para mí fue vital también.

¿Qué ha pasado este año en esa relación entrenador-afición, o parte de la afición?

Hay muchos puntos. Vengo de otro club que era de Ronaldo, estaban sufriendo el tema del escudo, a la vez me toca venir y se sufre el descenso. Y con un descenso, el 99% de los entrenadores se van porque saben que este camino va a ser duro. Nosotros tomamos la responsabilidad de trabajar sobre eso y de demostrar que este club tenía que estar en Primera. Sabíamos que íbamos a sufrir momentos difíciles por ese descenso y ser la cara visible de ese descenso. Era un desafío diferente.

Vas acumulando todo y después te toca mucho el límite salarial, con el segundo descenso casi seguido. Arrancamos con algunos jugadores del Promesas, que no es que no estuvieran preparados, pero podían estarlo mejor con una base mayor en el primer equipo, pero les usamos porque necesitábamos jugadores ya dentro de la cancha. No tuvimos buenos partidos y te suma todo lo otro que hablé. Es obvio que la gente se manifiesta por su club, porque quiere ganar, ascender, jugar lindo y mejor, y más cuando es el Real Valladolid, un club histórico que en Segunda tiene que marcar diferencias. Y esa diferencia no la teníamos desde el inicio, con jugadores o como equipo, porque hubo muchos recambios por la salud del club. Se juntaron muchísimas cosas pero, a pesar de todo, haber conseguido este logro es muy diferente. Después, obviamente, mis actitudes frente a eso para lograr blindar a los jugadores.

Pero ¿ante quién o qué?

Por la presión que podía surgir. Era 'Pezzolano, dimisión' pero a la vez podían silbar a los jugadores...

Que alguno hubo.

Sí, en momentos. Pero llevé la atención hacia mi persona. Creo que fue algo muy bueno para lograr el objetivo, muy malo para el distanciamiento de la afición conmigo. Opté por lo mejor para el club y lo dije, y hasta puse mi cara en ese sentido. Para mí era mucho más fácil ser más atractivo con la gente, abrir las puertas del entrenamiento todos los días y dar la razón a todo... y empiezan a silbar a los jugadores y a haber cosas que capaz que no podíamos llegar al objetivo. Creo que era el camino y hoy en día tenemos que estar todos orgullos que conseguimos el ascenso.

¿Y no es una mochila muy pesada a nivel personal? Como se suele decir, está en su sueldo escuchar el 'Pezzolano, dimisión', pero ¿cómo se remonta todo ahora?

Puede ser. Pero si se entiende el fin de lo que quise lograr, creo que mucha gente está orgullosa de lo que hizo el entrenador. Hay otra que no lo va a entender y va a sentir que el entrenador hizo todo contra la gente; pero fue a favor de todo eso, para lograr el objetivo. Al que se sintió afectado o muy agredido por el entrenador, le voy a pedir siempre disculpas porque no era ese el objetivo, era lograr el ascenso. Y el tiempo te termina dando la razón porque se logró. Ahora, trabajar y demostrar que este entrenador está preparado para lograr cosas más importantes en esta institución.

¿Le da miedo lo que pase en el inicio de la próxima temporada, esa mochila llena de piedras?

Miedo no. Es algo que no preocupa, me ocupa. Hay que buscar que entiendan que este entrenador sinceramente vino a hacer lo mejor para el club. Y lo dije desde el principio y puse hasta mi figura por delante para conseguirlo. 

No jugamos lindo pero fuimos eficaces, productivos. Fuimos el segundo mejor equipo de la Liga y con 42 fechas no es casualidad. Como entrenador me gustaría un modelo de juego más vistoso. ¿Cómo te van a contratar? Por como juega el equipo. Pero puse por encima de eso. Teníamos muchos jugadores nuevos, jóvenes, con experiencia que no se conocían, pero buscamos ser práctico para sacarle el juego a cada partido para lograr este ascenso. Cuando se empieza a entender el trasfondo del porqué y el para qué fue, creo que se va a valorar mucho y creo que por eso estamos en Primera.

Tiene un año de contrato, ¿le han dicho que va a seguir la próxima temporada? ¿Seguro?

El 8 de julio ya estamos aquí en la ciudad para arrancar el 9 la pretemporada. Los jugadores ya tienen sus trabajos individualizados...

¿Eso es un sí? ¿Le han dicho que sí sigue?

Sí, sí, está todo planificado. El año y la pretemporada están planificadas. Nunca se me pasó por la cabeza otra cosa. Internamente nunca se manejó otra cosa. 

¿Temió alguna vez por su puesto?

No. A ver, sabemos las reglas del juego de lo que es el fútbol si no consigues resultados o no haces bien tu trabajo. Y siempre sabemos que el partido a partido es vital para nuestro trabajo. Personalmente siempre me sentí fuerte. Siempre vieron que redoblamos esfuerzos en los momentos que había que hacerlo y nunca sentimos que podía suceder algo. Digo de puertas para dentro. 

¿Se plantea reunirse con la afición o con parte para hablar de todo lo ocurrido?

Lo hicimos el año pasado antes de iniciar, vinieron las peñas aquí, hablamos, le dije mi punto de vista y sin problema. Lo haría siempre y dejaría las puertas siempre para quien quiera venir a mí.

Da la sensación de que usted es pasional y la afición también, y necesita cariño...

Es una afición que quiere un entrenador con personalidad. Obviamente le gustaría jugar más lindo también. Pero ese distanciamiento fue por un objetivo en común. Cuando lo piensen, porque en el calor del año no lo ves, y repasen para atrás, creo que tiene mucho sentido lo que hemos hecho. 

Cuando estuvimos tras el descenso, les dije la verdad. Si ven y escuchan esto, les dije lo que estoy hablando ahora y lo dije el primer día, el club va a estar por encima de todos, hasta lo puse por encima mío. 

Segunda pretemporada al frente del Pucela, ¿habrá stage fuera de Valladolid?

Aquí tenemos todo lo que necesitamos. Estamos manejando diferentes lugares, mismo por los amistosos, contra quién va a ser. En principio, el 90% va a ser aquí. Si hay algún momento, de algunos días fuera, puede haberlo pero no será nada significativo. Aquí tenemos todo para hacer un buen trabajo.

Y será totalmente diferente al año pasado, que se venía de un descenso. ¿Qué espera de ella? ¿Cuántos cambios habrá en la plantilla? 

El tema del mercado se lo dejo a Domingo, que está más que preparado para eso y es el que sabe. Lo único que me ocupo es que sepa, como cada jugador que viene, que mientras estamos aquí, les vamos a exigir al máximo y queremos un jugador las 24 horas, todos los días del año. Que sepan que compromiso y sacrificio al cien por ciento, porque tenemos que saber sufrir en ciertos partidos y para eso hay que trabajarlo. Y venir a dar todo por esta institución, como lo dieron este año los jugadores. Los que están ya saben cómo va a ser y la exigencia que va a haber.

¿Qué ha pedido, un portero, un delantero...?

Hemos hablado cosas puntuales, pedir, pedir, no. Hay que ver el límite salarial, lo que tenemos y dejamos de tener. Puntualmente no hemos hablado ni de nombres ni de puestos.

¿Le gustaría, por ejemplo, que siguiese el capitán, Jordi Masip?

¿Te soy sincero? Me encantaría que siguieran todos. Sabiendo que hay que reforzar también. Pero todos se lo merecen. Pero sabemos como es el fútbol. Jordi es un gran capitán, una gran persona y gran profesional, y lo que nos dio dentro del campo fue muy bueno. Pero el tema de mercado se lo dejo a Domingo.

¿Qué le gustaría tener el 9 de julio? ¿Toda la plantilla? ¿O es imposible?

Sabemos que es imposible. Ojalá tuviéramos ya el 100%. Sabemos cómo es el mercado, no es imposible por nosotros; sino por cómo está planificado el mercado. A un entrenador le gustaría tener el 100% ya hoy. Pero sabemos que hasta el último día del periodo de pases va a haber mucho trabajo.

También ha dicho que ha hecho cosas por el bien del club, incluso jugando a un fútbol que no era tan vistoso, traicionándose a sí mismo, sacrificando su modelo por un objetivo. ¿El próximo año podría ocurrir lo mismo?

Sin duda puede ocurrir. Pero sí podemos mejorar detalles. Hay equipos notoriamente superiores en todos los sentidos, en presupuestos y en todo. Por eso, tenemos que armar un equipo muy fuerte mental y físicamente, y creyendo hasta el final, como lo hicimos este año, para lograr resultados. Sabemos que tenemos nuestra tabla, de rivales directos, en la que podemos ser protagonistas y buscar ir a por los partidos. Hay que tener esa versatilidad, para ir partido a partido. No van a ser todos iguales y, como dije este año, dentro de cada uno hay diferentes y hay que saberlos jugar. ¿Qué necesitamos? Cien por ciento de compromiso de esos jugadores, saber lo que se va a venir a jugar y la importancia de cada partido para nosotros.

¿Qué le ha dicho Ronaldo? ¿Vende?

No tengo ni idea. No hablamos más. Lo que haga será lo mejor para el club. Lo digo de corazón. Es una persona espectacular. Hay un negocio por detrás, es verdad, es un empresario, pero va a hacer lo mejor para el club. Porque lo único que ves que haces es lo mejor para el club.