La avalancha de casos de covid registrada en los últimos dos meses en Valladolid (ya van más de 73.000 positivos, más de la mitad de toda la pandemia) ha provocado un severo repunte de la mortalidad asociada al coronavirus, hasta unas cifras que no se daban desde hacía justo un año, cuando la tercera ola aprovechaba la ausencia de vacunas para llevarse por delante 333 vidas entre diciembre de 2020 y enero de 2021. Un año después, ya con el 91% de los vallisoletanos con al menos una dosis (el 86% tiene dos y el 48%, las tres), diciembre y enero han acumulado 182 decesos, si bien el grueso de los fallecimientos se corresponden con un enero del que se conocieron este miércoles los últimos datos oficiales: 134 muertes.
De este modo, enero de 2022 prácticamente triplica los datos de diciembre, que se saldó con 48 fallecimientos, y acumula más que los tres meses previos juntos, ya que noviembre acabó con 25 exitus, por los 31 de octubre y los 56 de un septiembre en el que todavía coleaba una quinta ola que acumuló otras 52 vidas en agosto, por las 17 tanto de junio como de julio. Era el inicio del verano, cuando la 'curva' de la mortalidad había estado en una zona de 'valle' a la que llegó tras los 31 decesos de mayo, los 59 de abril y los 84 de marzo. Con anterioridad a esto, las cifras fueron mucho más gruesas, debido a esa falta de protección vacunal, anotándose 187 en febrero, 158 en enero y 182 en diciembre. Aunque el peor dato de toda esta crisis se encuentra en noviembre de 2020, a lomos de una segunda ola que se llevó a 274 vallisoletanos en solo un mes. Antes, entre marzo y mayo de 2020, cuando eclosionó todo, los primeros datos hablan de 569 contagiados muertos en esos tres primeros meses acorralados por el SARS-CoV-2.
2.317 FALLECIDOS EN TODA LA PANDEMIA
La estadística de Sacyl incluye en este apartado a todas las personas que fallecen y que tienen un positivo covid en su historia clínica en los tres meses previos. De los 134 de este enero, el 80% superaban los 70 años, una ratio ligeramente inferior a la de la media de toda la pandemia, que se sitúa en el 88%, ya que 2.048 de los 2.317 acumulados en toda la pandemia estaban por encima de los 70.
De un modo claro, los números bajan a medida que lo hace la edad y, así, de los 134 de enero, 78 eran octogenarios; 28, septuagenarios; y 16, sexagenarios. En la franja de 50 a 59 años se contabilizaron diez muertes covid el mes pasado, ninguna entre los cuadragenarios, una de un treintañero y una de una veinteañera, que es la primera notificada en ese grupo de edad en Valladolid en estos casi dos años de lucha contra el coronavirus.
En términos absolutos, la estadística dice que 1.653 de los 2.317 óbitos fueron entre mayores de 80 años, por los 395 de la franja de 70 a 79 años y los 179 de 60 a 69. A partir de ahí, 69 en el grupo de 50 a 59 años, 13 entre los de 40 a 49, siete de 30 a 39 años y ese único caso ya citado de una joven de 20 a 29. De los 2.317 muertos covid, 1.172 eran hombres y 1.145, mujeres.