La Junta de Castilla y León aprobó este jueves en Consejo de Gobierno una partida económica de 2,5 millones de euros para Somacyl con el objetivo de financiar las actuaciones de rehabilitación, mejora y modernización de la estación de autobuses de Valladolid. Esta cantidad se añade al compromiso adquirido por la Administración autonómica.
"Esta actuación de la Consejería de Movilidad y Transformación Digital se enmarca en el Plan de Modernización de las Estaciones de Autobuses de Castilla y León para disponer de un sistema de infraestructuras complementarias del transporte público de viajeros por carretera apropiadas para el momento actual", destaca la Junta a través de un comunicado. "En este sistema priman los criterios de accesibilidad y eficiencia energética junto a la modernización de unas instalaciones y construcciones deterioradas por el paso del tiempo", dado que "en muchos casos se trata de edificaciones de más de 40 años que requieren ser reformadas para lograr una prestación de servicios adecuada a la normativa vigente", reconoce.
Bajo esta premisa, se ha intervenido en más de 30 estaciones, entre las que destacan las de León, Salamanca, Ávila, Palencia, Soria, Ponferrada o Ciudad Rodrigo.
Respecto a la intervención prevista en la de Valladolid, el objetivo es "su desarrollo y modernización bajo criterios de accesibilidad y eficiencia energética, la introducción de sistemas de digitalización y automatización de la movilidad y sistemas inteligentes de gestión del tráfico en las estaciones, así como la interconexión de las infraestructuras entre sí para lograr hacer del transporte un sector más limpio y eficiente". En este sentido, se consideran necesarias una serie de actuaciones que se centran en tres ámbitos concretos: rehabilitación del conjunto arquitectónico y habitabilidad del mismo; confortabilidad, accesibilidad y servicios a los viajeros; y eficiencia energética, digitalización y modernización tecnológica.
Entre las principales intervenciones destaca la renovación de la imagen exterior y de la iluminación, la redistribución de espacios, el cierre de la zona de dársenas y embarque a los autobuses, la instalación de una envolvente térmica y la climatización, así como de paneles solares fotovoltaicos y de herramientas tecnológicas de control que permitan a la infraestructura integrarse dentro del Sistema Inteligente de Transporte (ITS), entre otros.