El Estanco Aldeamayor, ubicado en la citada localidad vallisoletana, ha sido objeto esta madrugada de un robo por parte de cuatro individuos tras arrancar la verja de la ventana con el uso de una eslinga. El botín, sin embargo, no ha sido importante ya que los 'cacos' no han llegado a acceder al almacén del establecimiento.

El robo se producía alrededor de las 03.18 horas de este martes, que es cuando Javier, propietario del negocio y con domicilio a escasa distancia del mismo, recibía un aviso del servicio de alarmas en el que se le ponía al corriente de que varios individuos se encontraban en el interior del local.

Para cuando el estanquero ha llegado al local, escasos minutos después, los autores del robo ya habían huido y comprobaba entonces que habían accedido al interior después de arrancar la verja con el uso de una eslinga que habían atado a un coche, para luego destrozar la persiana y un cristal y lograr abrir de par en par las dos hojas de la ventana por la que accedieron tres individuos, mientras que un cuarto permanecía vigilante.

Ya dentro, tal y como ha explicado el afectado, en declaraciones a Europa Press, los ladrones se han apoderado de entre ocho o diez cartones de tabaco y de un bote de picadura, único botín obtenido ya que no han sido capaces de penetrar en el almacén del establecimiento, y ello a pesar de golpear la puerta del mismo con un pico u objeto contundente.

"Han sido más los daños que el valor de lo que se han llevado. Por lo que parece, esta gente tiene establecido un tiempo de actuación, de no más de tres o cuatro minutos, y si no logran lo que pretenden salen huyendo para evitar su detención", ha explicado el estanquero, quien recuerda que ya el pasado año su local sufrió otros dos robos más y un tercero frustrado.

El Servicio de Criminalística de la Guardia Civil se ha personado esta mañana en el local para tratar de obtener algún vestigio que pueda conducir a la identificación y detención de los autores, aunque el afectado, a tenor de las grabaciones de la cámara de seguridad, se muestra un tanto pesimista ya que los delincuentes han actuado provistos de guantes y con sus caras cubiertas con gorras y bragas.