El portavoz del Grupo Municipal Socialista en el Ayuntamiento de Valladolid, Pedro Herrero, ha advertido este jueves de que una posible ruptura del convenio para el proyecto de integración del ferrocarril en la ciudad pondría a la ciudad en riesgo de "perder la nueva estación de autobuses", que según el acuerdo firmado en 2017 iba a desarrollar la Junta de Castilla y León en los terrenos de los antiguos talleres de Renfe.

Así lo ha explicado Herrero en un comunicado recogido por Europa Press cuando, como apunta, faltan tres días para que expire el plazo que dio el ministro de Transportes y Movilidad Sostenible y exalcalde de Valladolid, Óscar Puente, para que el Ayuntamiento conteste al requerimiento relativo a una serie de proyectos de pasos subterráneos recogidos en el mencionado convenio.

De no atender al requerimiento, Pedro Herrero da por hecho que la Sociedad Valladolid Alta Velocidad estaría "abocada a la disolución" y se rompería el convenio para la integración ferroviaria firmado en 2017 por el Ayuntamiento de Valladolid, la Junta de Castilla y León y el Ministerio.

Por eso, el portavoz del Grupo Municipal Socialista, Pedro Herrero, insta al alcalde a actuar con sensatez y guiado por el interés general porque en caso contrario "Carnero va a condenar a la ciudad a quedarse sin la nueva estación de autobuses. Esto sería imperdonable".

Según el convenio, como menciona el PSOE, la Junta de Castilla y León se compromete a desarrollar el proyecto de una nueva estación en los terrenos que hasta hace unos años ocupaban los talleres de Renfe, situados frente a la terminal ferroviaria de Campo Grande, y a entregar a la Sociedad Valladolid Alta Velocidad el dinero del solar que hoy ocupa en la calle Puente Colgante la vieja estación de autobuses.

De hecho, el PSOE recuerda la Consejería de Fomento presentó en febrero de 2022 al comité técnico del plan de Integración Ferroviaria el anteproyecto de la futura estación de autobuses.

Según el documento, la terminal se ubicará en una parcela del barrio que surgirá tras el derribo de las instalaciones de los antiguos talleres de Renfe en Farnesio, ocupará una superficie aproximada de 15.000 metros cuadrados en la que se contemplan dos zonas diferenciadas y conectadas: un edificio funcional de 4.500 metros cuadrados que concentrará toda la actividad de recepción de viajeros y la zona de las dársenas con capacidad para 35 autocares y estancia de pasajeros.

"Como el señor Carnero va a conducir a la sociedad Valladolid Alta Velocidad al abismo, va a condenar a la ciudad y al barrio de Delicias a perder esta gran dotación", ha lamentado Pedro Herrero.

Sin embargo, por el momento la actuación que va a acometer la Junta de acuerdo con el actual equipo de Gobierno del Ayuntamiento no es una nueva estación sino la rehabilitación de la actual situada en la calle Puente Colgante. Para ello, se firmó el contrato de redacción del proyecto de las obras el pasado mes de julio.