Un año pensándolo, mes y medio desarrollando la idea y unas horas para ponerla en marcha. La alfombra que acompaña el paso de la Virgen de San Lorenzo sale de la de la cabeza, de las manos y, sobre todo, de la ilusión de José Antonio González Gerbolés. Para esta ocasión contará con la colaboración de los alfombristas de Ponteareas, uno de los mejores de España, que elaborarán un pavo real confeccionado con flores.

Se encargarán de diez metros lineales centrales de los 60 que comprende esta creación. La alfombra continúa con 14 medallones o flores y con greca pirametral de siete colores muy vivos, desde rojos, violetas y amarillos hasta la gama de verdes y anaranjados. Estará, como siempre, el escudo de la ciudad junto con la dedicatoria a su patrona. Este año, se incorporará en la otra cabecera el logo que los Jóvenes Cofrades tienen para presentar su candidatura como sede del próximo encuentro nacional. La decisión se tomará en Valencia el 25, 26 y 27 de octubre.

A pesar de que Gerbolés es su artífice, siempre cuenta con varios voluntarios para elaborarla. Su trabajo comienza el sábado 7 tras el concierto de la plaza Mayor. Ese momento es cuando él, junto con varios ayudantes, comienza a confeccionar este laborioso trabajo, hecho con marmolitas y ahora, también, con flores.

Alfombra de la Virgen de San Lorenzo - Foto: Jonathan Tajes

Además, son varias personas las que se acercan hasta allí para echar una mano en la medida que les sea posible, aunque Gerbolés recomienda que vayan a partir de las seis de la mañana, momento en el que ya están las plantillas puestas y pueden comenzar a trabajar. Antes, tiene la colaboración de cinco personas de su confianza, que provienen de Viana de Cega y de Castrodeza y que ya lo han hecho muchas más veces.

La mente de José Antonio Gerbolés siempre está trabajando para cosechar nuevas ideas, que comienza a desarrollar un mes y medio antes de uno de los días más especiales para él, el 8 de septiembre, cuando la patrona de la ciudad, la Virgen de Nuestra Señora de San Lorenzo, pisa la alfombra que a él le ha costado tanto confeccionar, momento en el que, confiesa, siempre se emociona.

24 alfombras. A sus espaldas lleva 24 alfombras desde que por primera vez descubrió el arte de algo que considera una pasión. Todo comenzó en el pueblo gallego de Burela, cuando vio que la calle estaba cortada por una alfombra que habían confeccionado los pescaderos de la zona. Tal fue su impresión que decidió pasar allí la noche para aprender las técnicas. Y así, ese mismo año, creó su primera obra para las fiestas de San Roque, en Viana de Cega.

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Desde entonces, sus creaciones han viajado hasta Roma para agasajar al Papa en el día del Corpus Christi, en un hermanamiento entre Valladolid y Lecce y en la Jornada Mundial de la Juventud.