Convencido de que el sector remolachero ya es el más pujante dentro de los cultivos de regadío en Castilla y León, busca ahora afianzarse como cooperativa supraautonómica para conseguir unas ayudas realmente sustanciosas que pudieran ofrecer un nuevo marco de oportunidades para el negocio. Afirma sin tapujos que el mercado marcará una estabilidad en el precio, lo que posibilitará que la cooperativa llegue a molturar 12.000 hectáreas, dos mil más que en la actual temporada.
¿Cómo se presenta la campaña de este año?
Con más hectáreas que el año pasado. Esperamos superar la media de producción por hectárea del socio y, a su vez, como ocurre siempre, con lluvia. El año pasado, por recordar, abrimos el 20 de octubre y cayeron 60 litros por metro cuadrado en Olmedo. Este año, abrimos el día 18 y ya llevamos esos 60 litros. A nivel fabril y de arranque, con cierta dificultad por la lluvia, y en el campo esperamos que sea mejor que el año pasado.
¿A cuánto puede llegar el rendimiento por hectárea?
El año pasado se alcanzaron las 103 toneladas por hectárea y esperamos superarla este año.
¿A cuánto puede llegar ese rendimiento entonces?
Es un tema difícil. Tenemos una bajada de la riqueza por problemas de cercospora. Es difícil de decir, pero esperamos superarla.
¿Por qué este aumento en superficie y toneladas de molturación?
Nuestro socio está muy motivado. La temporada pasada fue una tormenta perfecta en cuanto a las dificultades de agua, y la guerra de Ucrania, con un aumento de costes. Este año, sin haber bajado mucho, estamos en una mejor situación para la rentabilidad del agricultor. Además, el Consejo Rector ha fijado unos precios que son los más interesantes para un cultivo de regadío en Castilla y León.
La cifra de negocio del grupo se ha disparado hasta los 392 millones de euros, un 23% más que el periodo anterior. ¿Se debe al aumento del precio del azúcar?
Se debe a dos factores. El aumento del precio del azúcar, que supone una subida en la facturación, y al incremento importante de la empresa Agropro, donde Acor participa en un 50 por ciento. Ha sabido navegar muy bien entre las dificultades que tenían los mercados internacionales por la guerra. Ha sido una empresa que ha generado mayor facturación y mucho beneficio.
¿Cómo está afectando la guerra, o mejor dicho las guerras?
La guerra de Ucrania creo que el mercado mundial la tiene descontada, pero siguen siendo mercados inestables. Según llegue el invierno, la posición que tome Rusia afectará a los viajes de barco. Es un punto estratégico para la salida de cereal y oleaginosas, y eso es una interrogación. El nuevo conflicto surgido en Oriente Próxima va a subir especialmente el precio energético, pero no afecta directamente a nuestros productos.
La energía es un asunto fundamental.
Absolutamente para todo. Supondrá que los costes de producción van a subir.
Los socios recibirán, en la campaña 2023-2024, 75 euros por tonelada, un precio tal vez impensable hace unos años.
Los socios están contentos. Supone unas facturaciones por hectárea superiores a los 7.600 euros. Creo que el agricultor tiene margen suficiente a pesar de los elevados costes de producción para obtener un gran beneficio en el cultivo. Pero no solo son los 75 euros de esta campaña, si se aprueba el retorno en la asamblea, sino que garantizamos un pago por encima de los 71 euros en la próxima.
¿Está viviendo ahora la cooperativa un momento dulce después de campañas mucho más complicadas?
El mercado del azúcar no sube, pero está estable. Y segundo, aunque tengamos subidas y bajadas, es más importante que los costes de producción de nuestra fábrica estén contenidos. Los proyectos que se han imprementado, el punto cero, y el secado de pulpa, han generado que podamos trabajar con costes inferiores a los años pasados y no da más seguridad.
¿Se esperaba el resultado del megaproyecto de secado de pulpa de remolacha?
El primer año de funcionamiento ya se ha amortizado. Esperábamos amortizarlo en un periodo corto, pero no tanto. Por una parte, el coste de secado ha bajado mucho porque el gas ha subido mucho y, por otra, el coste de los derechos de carbono que este sistema no genera y no pagamos. No es el solo el ahorro energético, sino el asunto de los derechos.
¿Hasta cuándo se extenderá la campaña remolachera?
Dependerá de las lluvias. El año pasado fue de las campañas más cortas de la historia de Acor. Tuvimos que pararla el 15 de diciembre, y reanudarla posteriormente. Este año será de algo más de cien días, pero dependerá de la lluvia.
¿Se ha convertido la remolacha en el cultivo más rentable?
La remolacha se ha convertido en el cultivo más seguro y más rentable que existe en Castilla y León.
Con medias superiores a las cien toneladas, ¿es posible mejorar el rendimiento por parte de los socios?
Sí. De dos formas. Mejora genética y de manejo de cultivo. Hay novedades en referencia a las semillas, con tratamientos adecuados en los momentos idóneos. Pero yo creo que la mejora va a venir por la genética. Bruselas nos dice que tenemos que recortar los productos fitosanitarios y los genetistas tienen que mejorar mucho la semilla.
¿Se puede recuperar la estabilidad en el mercado?
Acor busca la estabilidad del cultivo y la empresa. Hemos crecido un 30% con respecto a la anterior campaña y esperamos seguir creciendo hasta llegar a un punto óptimo.
¿Ese punto en qué nivel se sitúa?
Entre las 12.000 y 13.000 hectáreas. Un 20 por ciento más de las que tenemos ahora. Creo que es posible.
¿Qué espera de la asamblea de socios del próximo 28 de noviembre?
Un ejercicio económico histórico que tendremos que explicar. Pero también se van a presentar unos nuevos estatutos, que llevamos explicando a los socios un año y consideramos que es un momento para que la cooperativa dé un salto que pide el tiempo actual.
¿Serán los socios que más producen los que tengan mayor poder de decisión?
Está más encaminado a que el socio que genera más actividad con la cooperativa tenga más opinión y que tenga más peso. Como tenemos muchos años, algunos socios ya no participan en la activad económica. Acor no va a echar a nadie, pero daremos más peso al que genera actividad y que es el futuro, que aquel que ya no lo hace.
¿A qué se refiere con el socio que tiene más actividad económica y que es el futuro?
?Es difícil incorporar jóvenes. Se pretende que el socio que cultiva remolacha, girasol, colza o incluso pistachos tenga más peso en la cooperativa.
¿Están los socios de Acor preparados para afrontar periodos de sequías prolongadas, que parece que tendremos que afrontar?
El problema del agua es fundamental en el campo. El próximo plan estratégico de Acor va enfocado al agua, tanto en fábrica como en el campo. Hay que mejorar. Los últimos años ha habido problemas de sequía. Creemos que la solución está en la gestión eficaz por parte del agricultor. Y también la regularización de los ríos. Hay un estudio sobre el posible recrecimiento de los embalses de la Confederación Hidrográfica del Duero, y esa es una posible solución. No vemos ninguna política sobre el agua.
Acor ha incorporado agricultores de Álava. ¿Qué puede suponer para Acor convertirse en una entidad asociativa prioritaria de carácter supraautonómico?
Acor ya es una cooperativa regional. Ya es un beneficio para el socio. Tiene mejores opciones con respecto a algunas ayudas. Esta nueva figura supondría un beneficio para la cooperativa porque las ayudas a la inversión son muy altas. El dar el paso de la autonómica a la nacional supone jugar en otra liga. Hay muy pocas cooperativas que lo tengan. La solicitud está ya realizada al Ministerio de Agricultura y ya depende de la administración. Cuando sea una realidad, supone que haya inversiones subvencionadas por encima del 40%.
¿Está afectando el precio del aceite de oliva en la producción de aceite de colza y de girasol por parte de Acor?
No. A todos nos ha sorprendido. El aceite de oliva tiene ese precio por la oferta y la demanda. Hay sobreproducción de aceite de girasol en el mundo. Hay buena cosecha a nivel mundial, igual que de aceites vegetales. Es un mercado mundial.
¿Ha cumplido Switch Mobility con los pagos de los terrenos que compró a la cooperativa?
Tiene cumplido perfectamente todos los compromisos de pago con la cooperativa. Tenemos unos compromisos asegurados, pero no han vencido aún. A día de hoy, no nos debe un euro. En 2024 la operación estará terminada.
¿En qué situación se encuentran las oficinas centrales de Acor en Valladolid?
Una parte minoritaria está en uso y el resto está en el mercado inmobiliario de Valladolid, solo en arrendamiento.