El partido entre el Recoletas Atlético Valladolid y el Abanca Ademar de León de este sábado supondrá la despedida del equipo azulón de Huerta del Rey en esta temporada, y el objetivo, como señala su entrenador, David Pisonero, es "tratar de poner la guinda con una victoria", que permita a los locales seguir puntuando, para cerrar el curso "de manera perfecta".

El técnico lo tiene claro: "Queremos que sea una fiesta, que Huerta presente un gran ambiente y todos puedan disfrutar de un buen espectáculo con un excelente duelo, en el que confiamos poder marcar nuestro ritmo y llegar con opciones hasta el final".

Aunque es consciente de que no será una empresa fácil ante un Ademar "que ha ido de menos a más y que llega en un buen momento a este tramo final de liga" y que, aunque fuera de casa "ha perdido puntos", no deja de ser un derbi autonómico, que siempre tiene una connotación especial para ambos conjuntos.

En opinión de Pisonero, que recoge Efe, el cuadro leonés "es un experto en defensa-contraataque, y hace goles rápidos que pueden destrozar el encuentro, de ahí que sea importante poder establecer un ritmo que les incomode, saber superar su defensa estable, con Popovic y Alberto, más su portería, y hacer el choque más redondo posible".

Será una cita de despedidas, ya que Freitas, Dimitrievski, Pipe García, Nagy, Afonso Lima y Rosell no seguirán en los gladiadores azules la próxima campaña, y por eso también supondrá un aliciente para todos ellos "porque han pasado buenos momentos aquí y quieren despedirse de una manera bonita", ha advertido el entrenador del Recoletas.

En el caso de Nagy, han intentado que pudiera continuar en el equipo "hasta la extenuación", porque "no solo es un refuerzo, sino que es un jugador de calidad que ha dado mucho desde que llegó y ha sido determinante en varios partidos, gracias a su rápida adaptación". "Pero Nagy pertenece a un club de Champions -Veszprem- y le buscará una competición de mayor nivel, ya que está preparado para jugarla, y para seguir dando pasos en su evolución profesional", ha añadido Pisonero, quien ha anunciado que, "no debería haber más bajas" en el cuadro azulón el siguiente curso.

Para este compromiso, podrá contar con Miguel Martínez, que se ha recuperado de sus dolencias, por lo que tendrá a todos los jugadores a su disposición, salvo a Alejandro Pisonero, que evoluciona favorablemente de la operación en el hombro, al igual que Nicolo D'Antino y César Pérez, quienes siguen su proceso de rehabilitación.

Se echará así el cierre en Huerta del Rey a una temporada en la que "se ha visto una liga muy igualada, lo que dice mucho de la calidad de Asobal, aunque está claro que el balonmano en Europa está muy bien, y que hay ligas potentes que demandan buenos jugadores, y España es un criadero de estos".

"La liga Asobal es cada vez más dura, más competitiva y con clubes más sólidos", ha concluido Pisonero, quien espera poder "poner el mejor colofón" a un año en el que han sido capaces de solventar los obstáculos y que están finalizando con su mejor juego, que esperan mantener ante el Ademar.