París vuelve a ser, desde esta semana, ciudad del deporte con la celebración de los Juegos Paralímpicos, que toman el testigo de los Olímpicos. Desde este jueves y hasta el 8 de septiembre, 4.400 deportistas buscarán la gloria en alguna de las 22 modalidades en liza. Entre ellos hay dos vallisoletanos, Luis Huerta y Marta Arce, que tratarán de alcanzarla, la gloria, en natación y judo.

Huerta ya ha debutado. Nadó este jueves los 200 libre S5, siendo sexto en la final, repetirá este viernes y tendrá dos pruebas más el 2 y 5 de septiembre.

Mientras que Arce, una de las dos abanderadas del combinado nacional, no competirá hasta el antepenúltimo día de competición, el 6 de septiembre.

Luis Huerta. - Foto: Comité Paralímpico EspañolAmbos ya saben lo que es ser paralímpico, aunque en el caso de Arce hay que añadirle que atesora tres medallas en sus cuatro anteriores Juegos y que estos, los de París, pueden ser sus últimos.

Luis Huerta acude a sus segunda cita paralímpica tras la de Tokio de hace tres años. Lo hace a sus 23 años, con la experiencia de ser internacional desde 2018 y con un palmarés en el que destacan un bronce Mundial y otro Europeo en 200 libre S5, la prueba que disputó el jueves; además de un oro en un Europeo en relevos 4×50 libre. 

Huerta logró marca de la temporada en la final disputada en la jornada vespertina (2:45:30) y mejoró su tiempo logrado por la mañana (2:46:54), después de haberse clasificado como séptimo para la final.

El nadador vallisoletano, "satisfecho" con el resultado, acusó en los resultados de las últimas citas internacionales la irrupción de nadadores como el chino Jincheng Guo, capaz de nadar uno de los cuatro largos de los 200 casi sin sacar la cabeza del agua, y que al final consiguió la quinta plaza, justo por detrás de Toni Ponce, medallista en los Juegos de Japón hace tres años.

En la piscina de La Dèfense Arena nadará además los 100 libre S5 (se ha clasificado este viernes para la final), los 100 braza SB4 (2 de septiembre) y quizá los 50 libre S5 (5 de septiembre).

El vallisoletano nació con una malformación en las extremidades (una agenesia en las dos piernas, además de tener solo dos dedos en la mano derecha y ausencia de medio brazo izquierdo), comenzó a nadar con 4 años en un programa de natación para niños con dificultades motóricas; a los 11 ya estaba en la piscina del Centro de Tecnificación Deportiva Río Esgueva y en Tokio rozó la medalla, siendo cuarto en los 200 libre (además de obtener sendos diplomas). Acude a París con su entrenador, el también vallisoletano Raúl Carrasco, que dirige además a la triple medallista Marta Fernández.

Marta Arce, en Tokio. - Foto: EfeMarta Arce es toda una institución del deporte. Afronta, a sus 47 años, sus quintos Juegos Paralímpicos. Y lo hace siendo abanderada del equipo nacional y de sus 155 deportistas.

Dominó durante más de veinte años el judo paralímpico en su categoría (menos de 63 kilogramos) y, tras una reforma en el reglamento internacional, compite en la clase J2 menos de 57 kilogramos.

Acumula tres medallas en sus cuatro Juegos anteriores, con dos plata en Atenas 2004 y Pekín 2008, y un bronce en los de Londres 2012. Rozó de nuevo el bronce en Tokio.

Marta nació con una forma de albinismo que le produce un déficit visual grave. Reside en Madrid desde hace muchos años y acumula medallas en Mundiales y Europeos.

En París tratará de poner el broche a su carrera (en principio lo iba a dejar tras Tokio, pero la irrupción de la joven María Manzanero, una judoca con gran futuro a la que intenta ayudar, la hizo cambiar de idea).

La representación vallisoletana la completará la técnico de baloncesto en silla de ruedas y miembro del staff del Fundación Aliados Valladolid, Sofía García, que forma parte de la selección española femenina de baloncesto adaptado.