La Comisión Europea ha propuesto una modificación específica de los anexos de la Directiva sobre hábitats. Esto adaptará la mencionada regulación al cambio del estatuto de protección del lobo de «estrictamente protegido» a «protegido» en virtud de la modificación del Convenio de Berna, que entró en vigor con el mes de marzo. Esta propuesta de la Comisión dará más flexibilidad a los Estados miembros en la gestión de sus poblaciones locales de lobos, de modo que puedan adoptar medidas que se adapten bien a las circunstancias regionales. Dado que el lobo seguirá siendo una especie protegida, las medidas de conservación y gestión de los Veintisiete deberán garantizar que se mantiene un estado de conservación favorable. Además, los Estados miembros seguirán teniendo la posibilidad de mantener un nivel más elevado de protección del lobo si lo consideran necesario.

La presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, ha declarado que «en algunas regiones europeas las manadas de lobos se han convertido en un peligro real, especialmente para el ganado. Hoy proponemos un cambio de la legislación de la UE que ayudará a las autoridades locales a gestionar activamente las poblaciones de lobos, protegiendo al mismo tiempo tanto la biodiversidad como nuestros medios de subsistencia rurales». Desde ASAJA se celebra la modificación de los anexos del Convenio de Berna, asegurando que este cambio es fruto de años de trabajo y reivindicación en Bruselas. Según la OPA, se trata de un éxito colectivo.

En cuanto a la aplicación de la medida en España, ASAJA ha recordado que, aunque se haya propuesto cambiar los anexos de la Directiva de Hábitats, esto no obliga a los Estados miembros a reducir la protección del lobo. En el caso de España, el Gobierno podrá mantener una protección más estricta si así lo decide, por lo que ahora la aplicación de estas medidas dependerá de la voluntad política de cada país. En el nuestro, el cambio de titularidad en el Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico (MITECO) no ha supuesto variación alguna en su posición, por lo que estos cambios no tendrán, de momento, repercusión alguna y el depredador seguirá incluido en el Listado de Especies Silvestres en Régimen de Protección Especial (LESRPE).

Ante este escenario, ASAJA ha anunciado que centrará su atención en el MITECO y en la nueva ministra, Sara Aagesen, exigiendo que se adopten las medidas necesarias para ajustar la normativa nacional a las nuevas disposiciones europeas. Además, ha advertido que estará muy vigilante con respecto a los datos sobre la población de lobos en España.

Aumento de ataques.

Castilla y León es la comunidad con más manadas de lobos de toda España y es un buen ejemplo de lo que ocurre en toda el área lobera del país. Hasta 2021, el depredador se podía cazar más o menos en la mitad de su territorio (al norte del Duero). Desde que en septiembre de ese año el lobo quedó incluido en el LESRPE, el número de cabezas de ganado muertas por ataques de lobo en esta comunidad se ha incrementado un 39%, con un total de 5.985 en 2024. Esto da una media de más de 16 animales muertos cada día y hay que tener en cuenta que el dato no incluye animales perdidos o heridos, abortos, reducción en la producción de leche y otros perjuicios que provocan estos episodios.

El consejero de Medio Ambiente, Vivienda y Ordenación del Territorio de Castilla y León, Juan Carlos Suárez-Quiñones ha destacado que «especialmente significativo es que el incremento de ataques y cabezas que se registra especialmente al norte del río Duero. Es decir, allí donde antes la Junta gestionaba de forma pública, responsable y técnica la especie, los ataques ahí ahora son mucho mayores. Entonces pone de manifiesto la relación directa de causalidad entre la inclusión del lobo en el LESRPE con el incremento de ataques y cabezas desmesurado en Castilla y León».

En este sentido, el consejero ha arremetido contra el MITECO al considerar que todos estos números, más las disposiciones europeas aprobadas en el Comité Permanente del Convenio de Berna, «cercan» al Gobierno al hacer «cada vez más injustificada» su posición de mantener el lobo «fuera de la gestión de las comunidades autónomas».

El PP pide que vuelva a cazarse al norte del Duero.

El Partido Popular ha defendido este miércoles en el pleno del Senado una moción para instar al Gobierno de España a que inicie «de forma inmediata» los trámites para excluir del LESRPE a las poblaciones del lobo que se encuentran al norte del río Duero y a revisar la estrategia española de conservación del lobo para que se adecue a los censos actuales y se apruebe una nueva con el consenso de las comunidades autónomas. Desde el PP señalan que las «rigurosas medidas de conservación» adoptadas por el Gobierno de España desde 2021 han derivado en un «descontrolado aumento» de la población de esta especie y en un «importante incremento» de daños en la ganadería extensiva que están «poniendo en riesgo la continuidad de las explotaciones ganaderas y llevando a una situación límite a la población del medio rural, ya ampliamente impactada por problemas de despoblación y envejecimiento».