Arturo Coello arrancará esta semana la temporada de pádel en Riad (Arabia Saudí). Lo hará con el objetivo de que 2024 sea el año de su confirmación tras un 2023 pleno de éxitos y victorias que le llevaron al número 1 del mundo, junto a su pareja de 'baile', el argentino Agustín Tapia.
A punto de cumplir los 22 años, el vallisoletano cerró el pasado año con 15 títulos, once en el World Padel Tour (Abu Dabi, La Rioja -Argentina-, Chile, Paraguay, Granada, Bruselas, Vigo, Viena, Marbella, Málaga y México) más cuatro del circuito Premier Padel (Roma, Madrid, Mendoza y París). A ellos hay que sumar otros cuatro de 2022, por entonces con Belasteguín de compañero, en su carrera.
Este 2024 todo cambia. Solo habrá un circuito y un calendario, bajo el nombre de Premier Padel y el auspicio de la Federación Internacional de Pádel. Serán 25 torneos (P1 y P2), entre los que no estará Valladolid, que acogerá un FIP Platinum entre el 24 al 30 de junio (en principio con Coello y Tapia como cabezas de cartel).
El primer torneo de la temporada, el Riyadh Season P1 tendrá a Ale Galán y Juan Lebrón como principales rivales del vallisoletano y el argentino. También estarán los 'superpibes', Franco Stupaczuk y Martín Di Nenno; y algunas parejas nuevas, como la formada por Paquito Navarro y Sanyo Gutiérrez; o la de Fede Chingotto y Momo González. También estará otro vallisoletano, Javier Martínez, que jugará con Alonso Rodríguez, aunque en su caso en la fase de clasificación buscando el cuadro final. En el cuadro femenino estarán Bea Caldera, junto a Ana Catarina Nogueira, pareja número 15; Alejandra Alonso, junto a Andrea Ustero, la número 16; Melania Merino, con Sofia Saiz, la 21ª; y Esther Carnicero, con Ksenia Sharifova, la 24ª. Alicia Blanco buscará el cuadro desde la calificación.
Así, Valladolid volverá a estar muy bien representada en el calendario internacional del pádel, destacando por encima de todos la presencia del 1.90 metros de Coello. Hace unas semanas reconocía en su casa, en Valladolid, que todo, los triunfos y el número 1, había llegado «muy rápido, pero aún tengo un montón de sueños por cumplir». Este año volverá a intentar cumplirlos junto al argentino Agustín Tapia, al que califica de hermano.