El Real Valladolid tiene un límite salarial de 13 millones. Es decir, cuenta con 3,6 menos del que tenía en el mercado de verano. Y, a pesar de ello, se mantiene como el segundo club de toda la categoría con más dinero de coste de plantilla. Solo el Elche, que tiene 23,8 millones, supera a la entidad vallisoletana en crédito disponible para jugadores, primer y segundo entrenador, y preparador físico del primer equipo; más filiales, cantera y otras secciones, que es lo que LaLiga incluye dentro del límite de coste de plantilla.

El descenso en la cantidad publicada por la patronal del fútbol llamó la atención, y mucho, esta semana. Por la cantidad, más de 3,6 millones; y porque de toda la Segunda solo siete clubes habían visto reducida su cifra (además del Real Valladolid, el Elche, el Burgos, el Cartagena, el Andorra, el Espanyol y el Tenerife), aunque el caso del Pucela ha sido el más alto en porcentaje, junto al Burgos, ambos con un 22 por ciento. Porque el Elche no llega a un 0,4%; el Cartagena se queda en el 0,4%; el Tenerife, en un 5%; el Espanyol, en un 6%; y el Andorra, en un 15%. Otros, como el Levante o el Eibar ni suben ni bajan, manteniendo la misma cifra. En Primera, el Barcelona, el Sevilla y Las Palmas son los únicos que han bajado.

¿Por qué ese descenso? El Real Valladolid, a través de su director financiero, Luis García, da a ElDía de Valladolid algunas explicaciones: «LaLiga actualiza los límites entre el mercado de verano y de invierno. Y puede haber diferencias entre la estimación con la que se iba a cerrar la 22/23 y cómo se cerró».

Y entre esas diferencias, se destacan la rescisión del cuerpo técnico anterior, encabezado por Pacheta, que tuvo lugar entre agosto y septiembre –«está todo resuelto desde entonces»–; variables en los empleados no deportivos; una serie de provisiones y contingencias con jugadores de otras temporadas; el canon del estadio con el Ayuntamiento, que tampoco estaba registrado a la espera de ver si salía el proyecto de la Ciudad Deportiva; unos gastos de la etapa covid, que en el caso del Real Valladolid se recogía un importe de Primera, que es donde estaba el club; más otras provisiones exteriores, como la de los agentes...

Todas esas circunstancias explican ese descenso, aunque la cantidad publicada tampoco es la real al cien por cien, ya que el Real Valladolid había excedido el límite salarial en un 40% en el mercado de verano, y lo sigue excediendo en el de invierno, sin hacer pública la cifra exacta.

Estos datos estaban encima de la mesa en las oficinas del José Zorrilla antes del inicio de mercado y con ellos ha 'jugado' la Dirección Deportiva para reforzar la plantilla con la llegada de Tárrega, Biuk, Amath, Ferreira y Negredo, cuatro en forma de cesión y el último como agente libre.