Santiago González

CARTA DEL DIRECTOR

Santiago González

Director de El Día de Valladolid


Cartas imposibles a Papá Noel y los Reyes Magos

17/12/2023

Me encantan estas fiestas navideñas porque desatan todo tipo de buenos sentimientos y mejores deseos para el prójimo, aunque durante el resto del año hayas hecho lo imposible por joderle la vida, con perdón de la palabra. Y es que durante estos días se crea un ambiente fraternal en el que todo el mundo parece transformarse en bondad, amabilidad, generosidad y tolerancia. Pero no se preocupen, que esto se pasa en cuanto los Reyes Magos doblan la esquina de vuelta hacia el Oriente, o sea que la sociedad recupera la realidad al amanecer del 7 de enero.


Muchos se estarán preguntando de qué va hoy esta carta, si es que pretendo divagar hasta rellenar el espacio destinado a ella semanalmente. Pero no, simplemente es producto del impacto que me ha producido la propuesta socialista realizada esta semana en el Ayuntamiento de Valladolid. El portavoz de la oposición le pidió al alcalde, en su primer encuentro tras la marcha de Puente, que el PP rompa el pacto de gobierno municipal con Vox, a cambio el PSOE se compromete a apoyar a Carnero en su travesía por este mandato de cuatro años. Mano tendida entre los dos grandes partidos, consenso en los grandes asuntos de interés general, acuerdos para desarrollar grandes proyectos para planificar la ciudad del futuro. Esta es una idea defendida por muchos ciudadanos, algo que debería ser razonable en una cultura de alternancia política que no debe cambiar el rumbo troncal de una sociedad que pretende crecer de forma sostenida en su desarrollo económico y su bienestar social.


Sin embargo, la iniciativa planteada por los socialistas vallisoletanos es como la carta a los Reyes Magos o a Papá Noel, que llega en poco más de una semana. En ellas se escriben deseos imposibles, aunque como ya sabemos que esos no podrán ser también pedimos otros más realistas para que no quede vacío el hueco que hay bajo el árbol navideño lleno de luces y colores. Desde luego que Pedro Herrero, el portavoz socialista, recordará la oferta del líder popular Núñez Feijóo a Pedro Sánchez para que prescindiera de los votos de independentistas y secesionistas en su investidura a cambio del apoyo del Partido Popular y elecciones en dos años. Por supuesto que no cuajó la cosa, lo mismo que ahora tampoco va a cuajar en el Ayuntamiento de la capital. No se puede intentar un acuerdo aquí con el PP mientras en Madrid se pacta con ERC, Junts y todos los que quieren dividir España o en el Consistorio de Pamplona se acuerda con Bildu darles a los sucesores de ETA el bastón de mando. Hay algo incongruente en todo ello. A veces en la vida, casi siempre diría yo, hay que elegir y luego hay que ser consecuente con la decisión tomada.


Es más, haciendo un gran esfuerzo y olvidándonos de la política nacional, me parece también imposible el compromiso del PSOE vallisoletano de apoyar a Carnero si rompe con Vox (tampoco entiendo eso de definir como democrático y progresista a Bildu y tachar de fascista y antidemocrático a los de Abascal, pero eso da para otro capítulo), ya que, como recordó Carnero poco después del encuentro, el principal proyecto del actual equipo de gobierno municipal es el soterramiento del ferrocarril, algo que rechazan de plano los socialistas.
Me atrevo a decir que, dejando los deseos imposibles de cumplir incluso con el milagro de la Navidad, lo que deben hacer nuestros políticos municipales es trabajar por el interés general de la ciudad y no dejarse llevar por enfrentamientos partidistas o políticos que no llegan al ciudadano y que solo sirven para crispar aún más el ambiente. Desde luego habrá proyectos en los que puedan coincidir PP y PSOE, incluso Vox o Valladolid Toma la Palabra, porque levantar muros no es bueno para nadie y, especialmente, es muy perjudicial para los vallisoletanos de a pie, que al final son los paganinis de todo. Por eso, les pido que llenen la carta a los Reyes Magos de peticiones realistas para la ciudad, dejen lo imposible.