El entrenador de la UD Las Palmas, Diego Martínez, ha advertido del peligro que supondrá la visita este sábado del Real Valladolid, colista de LaLiga EA Sports, muy necesitado de puntos y con Álvaro Rubio como técnico interino, tras la reciente destitución del uruguayo Paulo Pezzolano.
El técnico del conjunto grancanario ha dicho en la conferencia de prensa previa al choque que, "desde la necesidad", el equipo pucelano se convierte en un rival aún más peligroso, y esa circunstancia la conocen "de primera mano" por la reciente crisis que ha atravesado el cuadro insular, ya recuperado tras la llegada del preparador gallego a su banquillo.
Martínez recuerda, en declaraciones que recoge Efe, que este sábado jugarán su tercer partido en siete días, una semana "tan intensa como ilusionante", ya que ve a su equipo "motivado y feliz" después de ganar a domicilio al Barcelona, 53 años después en LaLiga, y al Europa, en la Copa del Rey, en ambos casos por idéntico marcador de 1-2.
"El equipo está muy responsabilizado en la recuperación y mañana afrontamos un partido muy exigente que habrá que trabajar mucho y bien", ha avisado el vigués. En su opinión, el Real Valladolid será un rival "muy complejo", pues tiene jugadores "con desborde por fuera" y con "alternativas" en el ataque.
"Tenemos que hacer nuestro camino, no mirar a los lados, ni al ruido de alrededor; lo que hemos hecho es muy bonito, es un balance extraordinario, pero ya pasó", ha subrayado en alusión a los dos recientes triunfos en la ciudad condal.
El técnico gallego reconoce que ha sido una semana "de mucho desgaste", y ahora afronta el siguiente partido, "que siempre es el más importante", sin mirar la clasificación, pues sería un problema "desviarse del foco".
A su juicio, ante el Valladolid deberán estar "muy metidos en el partido" con el objetivo de "seguir creciendo como equipo, con naturalidad", y recuerda que si no se emplean al máximo nivel o no están acertados, pueden "perder contra cualquier rival porque esto es Primera División".