El Consejo de Colegios de Médicos de Castilla y León publicó hace unas semanas una nueva versión de su estudio sobre la demografía de estos profesionales en Castilla y León. Concretamente, la evolución desde 2019 hasta 2024. Un documento que revela que Valladolid se ha convertido en la provincia de Castilla y León con mayor ratio de profesionales por cada cien mil habitantes. Los 555 de la provincia están por delante de los 536 de Salamanca, únicas provincias por encima de la media regional de 467. Por debajo quedan Soria (462), Palencia (444), León (430), Burgos (425), Zamora (413), Segovia (399) y Ávila (392).
Lo cierto es que Valladolid ha sido la segunda provincia más beneficiada del incremento de médicos colegiados en el último lustro, al pasar de 3.658 a 4.248, un 16,1% más. Un porcentaje que solo supera el 20% de Burgos, aunque en esta cifra están incluidos los médicos activos, los que están haciendo el MIR y los jubilados.
El presidente del Colegio de Médicos de Valladolid, José Luis Almudí, considera que el hecho de que esta provincia y Salamanca tengan la ratio de médicos más alta tiene que ver con su estructura sanitaria. Por ejemplo, Valladolid es la que tiene más centros de salud de la Comunidad, con 41. Además, tanto el Clínico como en el Río Hortega, así como en el Complejo Asistencial de Salamanca, incluyen una serie de especialidades que no disponen otros centros hospitalarios de la Comunidad, un factor fundamental para que muchos médicos prioricen estas provincias frente a otras. «Por ejemplo, estamos viendo constantemente las dificultades que tienen, sobre todo en atención hospitalaria, el área del Bierzo, en León, para cubrir las vacantes en su hospital», señala Almudí, que añade que «son zonas de dificultades cobertura donde cuesta que los profesionales se vayan a trabajar». El representante de los médicos de Valladolid explica que eso es así porque «no hay estímulos económicos» ni para la carrera profesional. Una cuestión que, recuerda, sigue pendiente de regular en las Cortes de Castilla y León.
Una opinión que contrasta con la del presidente del Colegio de Médicos de Burgos, Joaquín Fernández, que hace unos días señaló en Diario de Burgos que el hecho de que Valladolid y Salamanca lideraran la ratio de médicos tiene que ver con la presencia en esas ciudades de una facultad de Medicina. «Va bastante relacionado, porque si un joven hace Medicina en una ciudad con facultad, la probabilidad de fidelizarlo es esa población es más alta: hay más posibilidades de que haga el MIR en esa misma ciudad y que luego se quede a trabajar», señaló al rotativo.
Una opinión que no comparte Almudí. «Los vínculos que te atan a una ciudad están más relacionados con las posibilidades laborales que con el aspecto emocional», señala.
Por su parte, uno de los autores principales del estudio de demografía de los médicos, Graciliano Estrada, presidente del colectivo en Segovia, también opina que la infraestructura de Valladolid es un elemento mucho más decisivo que las facultades que puedan tener unas u otras provincias. «Hay especialidades que solo se ofrecen en los grandes hospitales de Valladolid y en el de Salamanca», asegura. Además, recuerda que esa «concentración de médicos «ha existido siempre», pero apunta «que antes en otras provincias no había problemas, y ahora sí», en referencia a la dificultad de encontrar profesionales que ejerzan en las zonas de difícil cobertura. De hecho, el estudio habla de una «deficiente» distribución de los médicos que precisa de una «reorganización y reforma del sistema sanitario en todos sus aspectos».
Apertura de facultades
Este cruce de opiniones llega en mitad del debate de la conveniencia de abrir dos nuevas facultades de Medicina en Burgos y León, ya confirmadas a partir de los cursos 2026-27. El decano de la de Valladolid, José María Fidel Fernández, no oculta su desacuerdo, porque considera que no hay suficientes profesionales acreditados para dar clase. De hecho, la propia facultad de Valladolid tiene problemas para encontrarlos. «Facultades con mucha tradición, como Sevilla, Salamanca y la nuestra no tienen profesorado, ¿cómo lo van a encontrar las nuevas?», se pregunta. Además, considera la apertura de tantas facultades, públicas y privadas en España va a crear una «superpoblación» de médicos a medio plazo. «En 2035 volverá a haber paro, como teníamos en los 80», vaticina.
Respecto a la opinión del presidente del Colegio de Médicos de Burgos, tampoco la comparte: «No hay ninguna relación entre que Burgos y León tengan una facultad y que los médicos se vayan a quedar allí, porque los estudiantes van donde consideran que se van a formar mejor... son carreras que cuestan mucho trabajo y los futuros médicos no van buscando lo fácil», finaliza.