Mercoalid ampliará su capacidad. La sociedad mixta que gestiona la Unidad Alimentaria de Valladolid ha encargado un estudio, que acaba de licitar por 150.000 euros, para diseñar esa ampliación, pero también cómo debe ser su modelo futuro de negocio. Un proyecto que coincide en el tiempo con el estudio de viabilidad del Hub logístico y agroalimentario.
Actualmente, tiene un grado de ocupación de casi el cien por cien, con 98 empresas operando en unas instalaciones que ocupan una superficie de 11,6 hectáreas. Esto la convierte en la Unidad Alimentaria más importante de Castilla y León y del noroeste español, donde los mercados centrales mayoristas ocupan 74.470 metros cuadrados y la zona de actividades complementarias dispone de 42.073 metros cuadrados.
El aforo completo de Mercaolid hace que, según sus responsables, sea uno de los principales problemas para la sociedad de cara al futuro inmediato. «Está impidiendo el desarrollo de proyectos interesantes y, por tanto, provocando pérdida de oportunidades», subrayan en el pliego de la licitación.
A esto se une el momento «especialmente estratégico» para el sector por el desarrollo del Corredor Atlántico y la terminal de mercancías, que situará a Valladolid como uno de los siete nudos intermodales estratégicos de la red arterial ferroviaria española.
Estudio
Una de las exigencias del estudio que se ha licitado es la definición de un «modelo óptimo» de negocio en el futuro, con un análisis de las necesidades y expectativas de los clientes actuales y potenciales. «En este contexto, el modelo de negocio propuesto para Mercaolid deberá justificarse en función del nuevo escenario derivado de la evolución prevista en la cadena de valor agroalimentario, la distribución de productos frescos, el suministro energético, la logística, la sostenibilidad y el consumo, entre otras», se apunta.
La nueva definición del negocio será la base para optar entre las cuatro alternativas que se plantean para la ampliación de Mercaolid. Una es la permanencia en la actual ubicación, reestructurando instalaciones y aumentando edificaciones. La segunda también contempla la permanencia en su ubicación, pero ampliando las instalaciones con la compra de terrenos o edificaciones colindantes. Y con la misma premisa de no mudarse, se plantea la ampliación con terrenos o edificaciones, aunque no estén en una ubicación próxima. Por último, la cuarta alternativa sería el traslado integral de la actividad a otra ubicación de mayor tamaño.
De hecho, en el proyecto del parque agroalimentario de 2017 ya se contemplaba el traslado de Mercaolid y también de Centrolid a los terrenos colindantes a la nueva estación intermodal. Algo que ahora volverá a estar sobre la mesa, aunque antes se debe definir el coste y los plazos estimados para cada una de las opciones.
Un estudio que deberá estar listo en cinco meses de la adjudicación del contrato.