La Polícia Municipal ha incorporado a su equipamiento seis pistolas táser y seis cámaras, unas novedades que ha presentado el concejal de Salud Pública y Seguridad Ciudadana, Alberto Cuadrado, acompañado por la superintendente de la Policía Municipal de Valladolid, Julia González.
La incorporación de estos dispositivos, seis en total, supone un "paso importante" en la mejora de la capacidad de los agentes, ya que les permitirá llevar a cabo sus cometidos de forma "segura y efectiva" al tratarse de una herramienta "adicional y efectiva" para abordar situaciones de conflicto de manera "más segura".
En concreto, durante la presentación de estos dispositivos, el concejal ha destacado que están diseñados para proporcionar a los agentes una opción de uso de la fuerza "menos lesiva" en situaciones que requieran controlar a individuos en intervenciones de alto riesgo.
En concreto, las pistolas táser emiten una descarga eléctrica que incapacita temporalmente al individuo que la recibe, lo que permite a los agentes reducir el riesgo de lesiones tanto para ellos como para el individuo en cuestión. Su uso requiere de una formación específica, por lo que la Policía Municipal de Valladolid, previamente a su entrega, ha realizado 16 ediciones de un curso de formación a un total de 92 funcionarios de Policía Municipal, una formación que se seguirá ampliando a tantos agentes como la requieran.
Los dispositivos cuentan además con una cámara, que sólo se activa en caso de uso del dispositivo, en situaciones de riesgo, y la captación de dichas imágenes cumple con la normativa en materia de protección de datos.
Para reforzar la seguridad en el uso de los dispositivos, la policía debe garantizar la disponibilidad de un desfibrilador, que portarán en los vehículos de las patrullas que potencialmente pueden utilizar las táser.