Valladolid es la provincia del país donde más bajó la criminalidad el año pasado. Así se desprende de los datos que publica cada trimestre el Ministerio del Interior. En 2023 se cometieron 19.045 infracciones penales, frente a las 20.293 del año anterior. Un descenso del 6,1% que solo logra igualar la ciudad autónoma de Melilla y que supera la ciudad autónoma de Ceuta, con una caída del 9,4%. De hecho, la bajada en Valladolid contrasta con el aumento del 5,9% registrado en todo el país. Otro dato que demuestra lo excepcional del comportamiento de la provincia es que solo hay otras seis que hayan logrado reducir el número de infracciones penales: Ciudad Real, La Coruña, Palencia, Pontevedra, Zamora y Zaragoza. Y ninguna de ellas lo hizo tanto como Valladolid.
Pese a ese descenso, hay ciertas tendencias que no varían. La más importante, el aumento de la ciberdelincuencia. Los 5.781 delitos del año pasado suponen un 9,4% más que en 2022. La mayor parte de ellos son estafas informáticas. Pese a las campañas de concienciación de las propias Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado y las diferentes administraciones, el aumento de los recursos y la formación de los agentes para atajar estas prácticas y el refuerzo de los sistemas informáticos, los delincuentes siguen encontrando un filón en unas prácticas que en ocasiones son muy difíciles de perseguir y que se alimentan de la imprudencia y la falta de conocimientos de buena parte de la población. Las estadísticas dicen que cada día se comete una media de 16 delitos de este tipo en Valladolid, sin tener en cuenta los que no se denuncian.
No obstante, este repunte se vio compensado con la bajada de la delincuencia 'convencional', que pasó de 15.009 infracciones a 13.264, un 11,6% menos. En este apartado destaca el descenso del 27,1% de los robos con fuerza en domicilios, establecimientos y otras instalaciones. El año pasado se registraron 697. Precisamente a principio de este año la Guardia Civil detuvo a once personas como presuntos miembros de un grupo organizado dedicado a esta actividad. Están acusados de asaltar cuatro viviendas en Aldeamayor de San Martín. Las estadísticas del Ministerio del Interior también revelan caídas de los robos de coches (-13,2%), del tráfico de drogas (-15%) y de los hurtos (-2,5%).
Sin embargo, hay otros delitos graves que muestran una tendencia muy diferente. Por ejemplo, los que atentan contra la libertad sexual, que fueron un 6,3% más gracias al importante aumento de las violaciones, que pasaron de ocho a 27. En este sentido, cabe recordar, por ejemplo, la detención en agosto de un joven de 16 años como presunto autor de una violación a una menor en Santovenia o la denuncia de otro presunto ataque similar en el entorno del Campo Grande a finales de año.
También es significativo el aumento de homicidios en grado de tentativa, es decir, aquellos en los que el autor no llega a matar a la víctima por causas ajenas a su voluntad. De los cuatro de 2022 se pasó a 16 el año pasado.
Por otro lado, no se registró ningún secuestro, frente a los dos de 2022 y los homicidios dolosos y asesinatos bajaron de ocho a dos, el doble crimen de Paloma Pinedo y su hija India López, de ocho años, que se produjo en enero.