El UEMC Real Valladolid Baloncesto tratará de sumar este viernes su cuarta victoria consecutiva. Después de imponerse en Castellón tras el parón internacional, el cuadro blanquivioleta recibe a un renovado y peligroso Rioverde Clavijo y tratará de prolongar la buena dinámica para no perder fuelle con la parte alta de la tabla.
Los de Paco García, afianzados en el octavo puesto con cuatro triunfos sobre el siguiente (Ourense), buscarán seguir sumando y mirar hacia arriba. Con un balance de 14-18, el cuadro vallisoletano se encuentra en una situación opuesta a la del Rioverde Clavijo, último clasificado, con un registro de 3-19 y seis partidos al hilo perdidos. Eso sí, los riojanos llegan después de firmar cuatro refuerzos importantes en las últimas semanas y con bazas más que suficientes para poder ganar a cualquiera.
El cuadro vallisoletano, con la enfermería vacía y libre de bajas, deberá emplearse a fondo para imponerse a un equipo talentoso, que juega un buen baloncesto, alegre, y al que solamente le está faltando conseguir mejores resultados. El técnico Jenaro Díaz dirige un plantel joven y con calidad, reforzado recientemente y con argumentos. A la dirección de Alberto Moreno, que ya causó sensación en la ida, y de Juan Coffi, ecuatoguineano y jugador a las órdenes de Alejandro Paniagua en el pasado parón internacional, han sumado la aportación de Marc Peñarroya, y también cuentan con Miguel de Pablo para cerrar la posición de base.
El perímetro está notablemente cubierto con la presencia de los hermanos Urtasun: Álex y Txemi. Dos clásicos por antonomasia del baloncesto español y de la LEB Oro, capaces de anotar, aportar conocimiento y control al juego. Dos armas muy peligrosas y con galones para aburrir a los que hay que añadir la amenaza de David Knudsen, el eléctrico Kevin Torres, que lo lleva de familia, y la aportación de Hugo Arbosa y Pau Treviño.
En posiciones interiores, cerca del aro, Andre Norris llega como duda después de un tiempo fuera, así como Tamba, por sanción, y que debería estar disponible. Al 'cinco', Yasin Kolo, uno de los recientes refuerzos que ha llegado para aportar solidez y dureza en la pintura, y Javier Nicolau, con un futuro prometedor, son los nombres destacables del equipo riojano.
En el partido de ida, el Rioverde Clavijo ya dio buena muestra de su potencial, aunque el UEMC Real Valladolid Baloncesto logró un triunfo muy serio que supuso la séptima victoria consecutiva. En Logroño, el cuadro vallisoletano, con solvencia y un sobresaliente nivel defensivo, se impuso a domicilio tras sobreponerse a un mal y después de un duelo marcado por una primera parte vistosa y una segunda más trabada y sin ritmo, pero que se ganó con oficio y solidez.
Sabedor de que la enjundia del choque, Paco García incidió en el "respeto" que siente y su equipo debe sentir por un Rioverde Clavijo peligroso: "Hemos de dar la importancia que merece al partido. Es el colista, es verdad, pero si no respetamos rivales, no respetamos nuestro trabajo. Hay incógnitas alrededor de un rival nuevo, que no tiene nada que ver con el que ha sumado derrotas. Juega alegre, puede complicar la vida a cualquier rival, como la semana pasada jornada con Coruña, y hablamos del líder, que le gana en el último minuto. Máximo respeto, la historia está llena de peces pequeños que se comen al grande. Se lo he puesto en pizarra a los jugadores. Máxima alerta, atención y concentración. Cuando juguemos con los grandes posiblemente no haga falta, pero ahora sí, así que en guardia".