Guerra que no tendrá repercusiones en el funcionamiento de las bodegas de la Denominación de Origen Rueda, al menos de momento. El Consejo Regulador ha decidido la incorporación de ocho variedades de uva (seis blancas y dos tintas) a la cartera de la DO. Las variedades blancas viura, viogner y chardonnay se convierten en principales además, por supuesto, de las mayoritarias verdejo y la sauvignon blanc. Sin embargo, son las nuevas variedades secundarias permitidas las que han provocado la apertura de una ardua polémica entre denominaciones y zonas vitivinícolas. Son la garnacha blanca, gewüstraminer, moscatel de Alejandría, moscatel de grano menudo, riesling y godello. Especialmente, esta última ha ocasionado que desde El Bierzo se haya abierto la caja de Pandora, al entender que Rueda 'roba' esta uva autóctona a la marca leonesa.
El Consejo Regulador ha defendido su decisión y ha querido dejar claro que no es algo nuevo, sino que la Godello lleva plantada en Rueda desde el año 1996. Indican, de hecho, que varios viticultores y bodegueros de la zona llevan años trabajando en esta variedad y sacándola al mercado.
¿Por qué el Consejo hace ahora oficial el uso de estas variedades? La pregunta parece sencilla y la respuesta, también. Las bodegas pretenden, simplemente, abrir su abanico de posibilidades a la hora de elaborar sus vinos. Hay que tener en cuenta que las variedades secundarias no podrán exceder de un 25 por ciento en la elaboración de los vinos. Esto quiere decir que las diferentes marcas pueden usar uno de cada cuatro litros de vino de sus elaboraciones con uva procedente de estas variedades, entre ellas Godello.
La normativa recoge que, además, estas variedades no se puede indicar en las etiquetas. Según fuentes de la DO consultadas por este periódico, la intención del consejo es abrir la posibilidad para que las bodegas elaboren y hagan pruebas con vinos que contengan diferentes uvas y tengan la posibilidad de sacarlos al mercado sin la necesidad de que aparezcan en la etiqueta.
En la actualidad, hay 38 hectáreas de Godello que trabajan bodegas y viticultores vinculados a la denominación. Esta variedad se utiliza para la elaboración de vinos que salen al mercado fuera de la denominación. Ahora, estas bodegas, por ejemplo La Soterraña, tendrán la posibilidad de incluirlo en sus vinos, pero dentro de la DO.
Tanto bodegas como viticultores tienen claro que esta decisión es «una apuesta de futuro», ya que actualmente no se puede sembrar hectáreas dentro de la denominación. Esto significa que las bodegas no pueden sembrar vides a no ser que arranquen las ya existentes, aunque sí se puede injertar.
Los viticultores no están inmersos ahora mismo en estos cambios. Juan Ruiz indica que en estos días están? inmersos en labores de vendimia y que este asunto «pertenece más a las bodegas que a los viticultores», ya que en un primer momento se mantendrán su apuesta por el Verdejo. «Es nuestra variedad y continuaremos con él». En el caso de que alguna bodega se decante por sembrar nuevas vides tendrá que esperar a la nueva producción, lo que hará que puedan pasar unos años.