El equipo de gobierno del Ayuntamiento de Valladolid, formado por PSOE y Toma la Palabra, aseguró hoy que tiene medidas en marcha y herramientas ante el problema de sequía y garantizó el suministro en el consumo ciudadano pese a esta situación por la falta de lluvia.
Así lo expresaron la concejala de Medio Ambiente y Desarrollo Sostenible, María Sánchez, y el portavoz del grupo socialista en el consistorio, Pedro Herrero, al expresar los argumentos para rechazar la moción del grupo popular, defendida por Pilar del Olmo, en la que urgió un plan específico de ahorro del consumo del agua y un bando de la Alcaldía junto con una campaña de concienciación.
Del Olmo aseguró que no era "catastrofista" al presentar los datos objetivos de sequía y lamentó que la propuesta, aprobada por el resto de grupos de la oposición, decayera por el rechazo de los concejales del bipartito de gobierno. La 'popular' evidenció que se riega con agua potable algunos jardines de la ciudad.
En su intervención, Sánchez apeló al plan de emergencia de la sequía, acordado en 2017, y subrayó que la herramienta está, si bien se mostró abierta a valorar propuestas concretas que pueda realizar el PP, pero también relató las campañas de concienciación puestas en marcha, el aumento de la inversión hasta los 40 millones desde la municipalización del agua o la existencia de una tarifa progresiva en el consumo.
"Las medidas son suficientes, el Ayuntamiento ha hecho los deberes", argumentó poco después el socialista Pedro Herrero, mientras que del Olmo replicó a ambos que una ordenanza "obliga" y un plan, como en su opinión se está viendo, no, por lo que insistió en que se acuerde una norma.