Los servicios de Inspección de Castilla y León y la Guardia Civil cuentan ya con más herramientas para redoblar los controles sobre los VTC y combatir la competencia desleal con el taxi. Para ello, existe un sistema electrónico que permite conocer los servicios contratados y comprobar si respetan la regla que les obliga a realizar el 80 por ciento de su trabajo en la comunidad en la que recibieron la autorización.
De esta forma, los servicios de la Consejería de Fomento y Medio Ambiente incorporan un nuevo sistema informático, habilitado por el Ministerio de Fomento, para la consulta de las comunicaciones de los servicios de arrendamiento de vehículos con conductor. Esta medida, dependiente de la Dirección General de Transporte Terrestre, persigue facilitar el control del cumplimiento de las condiciones de prestación de los servicios VTC mediante un registro electrónico.
De este modo, cualquier VTC demandado deberá dejar rastro mediante una comunicación a este registro, lo que permitirá consultar los datos del servicio. Para ello, existen dos formas de acceso, una a través de una aplicación web disponible en el portal del Ministerio de Fomento y otra mediante un servicio web que permitirá a las empresas integrar esta comunicación en sus propias aplicaciones informáticas.
En ese sentido, este registro VTC permite a los órganos de control de la Junta la consulta y el control tanto de la contratación previa al inicio de los servicios, como de la regla de la habitualidad, según la cual el 80 por ciento de los servicios VTC deben ser prestados en la comunidad autónoma donde se encuentre domiciliada la autorización. Este avance tecnológico se suman a otros como el procedimiento sancionador por vía telemática o el pago con tarjeta en controles en carreteras, actualmente en pruebas o el sistema de control biométrico para los cursos de Certificado de Aptitud Profesional (CAP). Igualmente, también ha incorporado ‘tablets’ en los controles en carretera, la implantación de revisiones por vía telemática o la conexión con las bases de datos de la Tesorería de la Seguridad Social.
El nuevo Plan de Inspección de Transporte por Carretera pivota sobre 19 líneas de actuación,que en el caso de las mercancías se centra en el peso, las cooperativas de trabajo, los productos peligrosos y los profesionales no residentes. En el caso de los viajeros tendrán en cuenta el cumplimiento de las condiciones de concesiones, el transporte escolar y los servicios VTC.
También pondrán especial énfasis en la vigilancia sobre los tiempos de conducción y descanso, las manipulaciones del tacógrafo y el limitador de velocidad o la formación de los conductores.
Sanciones
Las nuevas acciones parten de las 37.625 inspecciones realizadas, que dieron lugar a 18.558 sanciones. De ellas, la mayoría se interpusieron en los controles de carretera con 35.424 vehículos, a las que se sumaron 656 visitas a empresas con 1.841 vehículos. Además, se vigilaron 28.690 vehículos de transporte de mercancías y 2.728 de viajeros con autorización nacional, mientras que entre los internacionales, se actuó sobre 5.468 de mercancías y 109 de viajeros.
En la provincia de Ávila se controlaron 2.844 vehículos; en Burgos, 2.874; en León, 4.891; en Palencia, 3.989; en Salamanca, 5.507; en Segovia, 3.529; en Soria, 4.987; en Valladolid, 3.787, y en Zamora, 4.857.
Respecto a las denuncias encabeza el ranking de 2018 Soria con 3.188, seguida de León con 2.966; Zamora, con 2.264 y Valladolid, con 2.256. Menor número se contabilizaron en Ávila (1.239), Burgos (1.263), Palencia (1.997), Salamanca (1.893) y Segovia (1.492). Además, se registraron 1.181 inmovilizaciones, de las que 476 se dieron en Palencia, 128 en Valladolid y 108, en Zamora.
En relación a los tipos de infracciones, los tiempos de conducción y descanso motivaron el 71,76 por ciento de las denuncias, con 13.318, a las que siguieron las interpuestas por excesos de peso, con 2.330, que supusieron el 12,55 por ciento. Además, las referidas a la autorización para el transporte dieron lugar a 1.890, un 10,18 por ciento. A ellas se suman las centras en la carencia y manipulación del tacógrafo, con 845, un 4,5 por ciento.
En las campañas especiales, destaca la referida al transporte escolar en la que se controlaron 538 vehículos, de los que 147 resultaron denunciados. Además, en relación al transporte integrado -escolar y general-, se realizaron 204 sobre otras tantas rutas, con 3.272 pasajeros. Tan solo se pusieron ocho sanciones.
Finalmente, sobre las VTC, se controlaron 25 centros de afluencia masiva, donde se formularon dos denuncias. Además, se inspeccionaron a 50 empresas, lo que supuso un control de 296 vehículos, de 4.73 contratos/hojas de ruta, con tres sanciones.