Después de permanecer callado, pese a los ríos de tinta que ha hecho correr su lesión, ayer Leo Messi no pudo más y decidió dar su opinión sobre todo lo que ha pasado estos días. Tajante y duro, el argentino instó a «no buscar cosas raras» en lo referente a la dolencia en el bíceps femoral de su pierna derecha que le mantendrá alejado de los terrenos de juego entre seis y ocho semanas.
«Voy a continuar con el mismo plan que se había armado en el inicio de la temporada. Se pueden decir muchas cosas, pero mi lesión fue algo casual», apuntó la ‘pulga’ al diario argentino Ole para tratar de zanjar la polémica que se ha generado en torno a su lesión.
El ‘10’ azulgrana quiso despejar las dudas sobre temas como su alimentación o la acumulación de partidos, dos aspectos que se han puesto en entredicho estos días. «Esta lesión pasó porque tenía que ocurrir. No soy el único que juega muchos partidos en la temporada. Por otro lado, mi alimentación es la misma de siempre, se inventaron muchas cosas», señaló el atacante ‘culé’.
Sobre Juanjo Brau, fisioterapeuta del Barcelona que trataba a Messi habitualmente, el argentino quiso aclarar que si ahora no está tanto con él es porque «le pusieron como jefe, con mayor responsabilidad». Una circunstancia que, además, alegra al delantero, ya que «es algo que hace crecer a Brau en su vida personal».
Otro de los temas de los que no eludió hablar fue de su pretemporada, en la que viajó a diferentes países para realizar diferentes actos benéficos, en lugar de descansar. «Los partidos en vacaciones son solo distracciones sin presiones. Nos juntamos, jugamos y ayudamos en algún tema social. Los disfruto», apuntó.
También incidió en que «mientras esté bien» jugará «lo que sea necesario», y que cuando el técnico le quiera cambiar lo hará y «no pasará nada», en referencia a las voces críticas que han señalado en las últimas fechas que el argentino juega por decreto y no le gusta ser sustituido.
Asimismo, el ariete barcelonista dejó claro que no va a forzar su vuelta: «El plan es volver cuando el cuerpo me diga que estoy bien».
De hecho, la ‘Pulga’ tiene muy presente que éste es año de Mundial. «No tengo que cambiar por el torneo de Brasil. Cuando llegue el momento, me voy a entrenar para una competición tan importante», destacó. Sin embargo, en su país, comienzan a surgir las dudas del verdadero potencial de la albiceleste sin Messi en el campo, sobre todo, tras el empate ante Ecuador. Y es que el eventual ‘plan B’ de la selección argentina no acaba de convencer a casi nadie.