«Actualmente tenemos demasiado compartimentada la educación»

M. Palomino
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Como profesor ha querido darle otro aire a la educación. Su proyecto educativo gamificado 'Salvemos a los animales' le ha llevado a la selección final de los Premios EDUCA promocionado por las familias de sus propios alumnos

Alejandro Herrán Martínez. - Foto: Jonathan Tajes

Ha sido nominado por segunda vez como uno de los 50 mejores docentes de España en los premios EDUCA Con su proyecto de gamificación en las aulas «Salvemos a los animales».

 

Primero de todo, a qué alumnos da clase, ¿Qué edades tienen?

Ahora soy maestro de alumnos de primaria, de 6 a 12 años, según las necesidades del colegio, este año he dado clase en 2º de primaria, en la especialidad de música

Su proyecto, ‘Salvemos a los animales’ , ¿en qué campo funciona?

Se trata de un proyecto global, nace de ciencias, de la asignatura de Ciencias Naturales y Ciencias Sociales, que lo teníamos todo como ciencias, además de la asignatura de ‘Valores’, que también imparto. 

Y aglomera todas en un una dinámica conjunta para todas las asignaturas del horario

 

¿Cómo lo ha implementado en las aulas? ¿A través de qué medios?

En alguna actividad en concreto sí que se ha utilizado las TIC, pero no ha sido lo principal. Yo me baso en lo que tengo que dar, lo que hago es crear una narrativa, una aventura en la que los alumnos son los protagonistas y para ir superando etapas, tienen que ir aprendiendo. 

Entonces, lo que trato es que para ellos no sea una obligación aprender, sino ellos quieren aprender las cosas ya que es el método por el que ellos van avanzando en esa aventura, que es sobre lo que gira la gamificación. 

 

¿En qué consiste el proyecto, cómo está aplicado a la dinámica de clases?

Funciona desde todas las asignaturas, es decir, para enseñar les paisajes, lo que hago, en vez de directamente ponerme a explicarlo, les encomiendo una misión, los niños son superhéroes que tienen que ayudar a un animal característico de cada paisaje elegido, la foca monje del mediterráneo en el paisaje de costa, el lince ibérico en la llanura, paisaje de montaña con el oso pardo y el desmán ibérico en el paisaje de río. 

Eso me sirve a mí para darles a conocer estos hábitats y sus características además de sus problemas medioambientales, por ejemplo: el paisaje de costas cuenta con un problema de contaminación de plásticos. 

Este es el aprendizaje que ellos tienen que tener, de esta forma sabemos lo que pasa y estudiamos al animal para saber lo que es mejor para su entorno.

 

Al ser un área multidisciplinar, ¿como incluye a todas las asignaturas?

Para envolver todas las disciplinas a través de esa narrativa, desde la asignatura de ‘Valores’ recogimos los residuos del patio, para después pesarlos y hacer estadísticas de ello, con eso ya nos adentramos en matemáticas también. 

Para Lengua, con papel reciclado, escriben todas las acciones medioambientales que ellos realizan, trabajando lectoescritura y así se encadena todo, la parte de los paisajes unida a Ciencias Naturales se une el papel de los medios de comunicación en Ciencias Sociales. Escribimos cartas a empresas para ver sus acciones medioambientales y  montamos una radio en el colegio a través de podcast donde comentábamos esas acciones sostenibles de estas empresas; además creamos un periódico, un blog en internet e incluso creamos un plató de televisión.

 

Al final, lo que tiene que dar es lo que está marcado por ley...

Al final el objetivo es ese, tengo que dar lo que manda la ley como profesor, pero en vez de dar la clase como un proceso de memorizar los contenidos, lo explico dentro de situaciones reales donde los alumnos son los que quieren aprender para ser parte de la aventura, además, cada vez que las acciones medioambientales no eran las adecuadas, cada animal perdía vida, teniendo un objetivo de que al final de curso se salvaran los animales.

 

¿Ha sido el proyecto de todo el año o has empezado otras iniciativas?

Tuve otros dos proyectos durante el curso, el primero fue en la cocina, aprender cocinando, pero se trataba de un proyecto separado, solo trataba de ciencias, poco a poco fui aumentando su rango de acción en las asignaturas. 

En el segundo trimestre inicié uno de todas las asignaturas, que trataba solo de superhéroes, en el que tenían que salvar el planeta, que sirvió para dar salida al proyecto del tercer trimestre, donde los alumnos firmaban un contrato de adhesión, trabajando la Lengua, redacción, compromisos, deberes… y se meten ya en el papel y trabajan en ello involucrados al máximo como si fuera algo suyo.

 

Los exámenes de toda la vida, ¿en qué formato quedan dentro de este proyecto que ha iniciado con los alumnos?

Los exámenes siguen, pero lo que intento es no poner una nota numérica en las pruebas, prefiero dar una ficha con unos ítems sobre lo que tienen que aprender para que ellos, tanto el niño como los padres, sepan lo que ha aprendido y lo que no.

Lo que marca la ley es que a final de trimestre vaya una nota, es la legislación y obviamente, si lo has aprendido todo, pues será un diez en la nota y si no lo sabe será un cero, eso no lo puedo cambiar, pero prefiero dar más información y ver que han aprendido y que es lo que no, lo que me parece más importante es que el alumno demuestre lo que sabe y no sabe, es cierto que el examen da información, pero que es la única manera de obtener esos datos, pues no lo es.

 

Por ende, con este tipo de evaluación no verá a niños con capacidad ahogarse en una prueba teórica sin más vuelta de hoja que el aprobado o el suspenso...

Muchas veces a lo mejor que falle en un examen no significa que no se lo sepa, puede ser por presión, por tiempo, porque no ha entendido bien el enunciado y no se ha atrevido a decirlo, hay muchas casuísticas por las que un niño falla en un examen y no quiere decir que no se lo sepa, por ello a lo largo del proyecto vas hablando con ellos, preguntando cómo van y viendo sus progresos. 

Para mi la evaluación es todo lo que pasa en el aula y soy partidario de los exámenes, dan un aprendizaje y permiten enfrentarte a situaciones de este tipo, pero tampoco me parece el único modelo

 

Entonces, ¿los resultados han mejorado en relación a este método?

Principalmente hay una motivación, hay un querer por su parte para aprender, ya no es la obligación de estudiar, son ellos los que quieren saber más y salvar a los animales, se meten en el papel, cuando hay una motivación, eres tú mismo el que tienes esas ganas.

 

¿Cree que estas iniciativas de enseñanza son el paso hacia una reforma del sistema educativo?

Me gustaría que se trabajará más lo que se tiene que aprender, no por ejemplo estancarse tanto por áreas, considero que tenemos demasiado compartimentada la educación, pero todo esto requiere mucha coordinación, está muy limitado por los horarios…, tiene bastantes complejidades, para ello las leyes educativas deberían adaptarse en ese sentido, dar más libertad y que se trabajara de manera mucho más práctica.

Está claro que hay ciertos contenidos que los alumnos tienen que aprender, pero la cosa está en cómo lo aprenderemos, tampoco creo que haya que obligarnos a enseñarlo de una manera única, hay muchas maneras y muchas válidas, yo no voy a poner mi modelo como el mejor o el único, personalmente me funciona y yo creo en ello, pero hay otras metodologías que también funcionan. 

Una no quita a otras, es más, se complementan en muchas partes del currículum deben abordarse de una manera o de otra, lo vital es que los alumnos vean válido el aprendizaje, que vean la utilidad que tiene.

 

¿Puede haber algún malentendido con este modelo educativo?

Hay que evitar confundir gamificación con conductismo, muchas veces si no se plantea bien los objetivos y las actividades se pone en riesgo de que se hagan las cosas por obtener una recompensa y no por aprender.

 

En relación a esto, ¿ha tenido alguna crítica de compañeros, familias...?

Críticas directas no he recibido, puede ser que alguna familia en algún momento, de primeras, le da la sensación de que su hijo está jugando y no aprende en el colegio, pero al final cuando ven los resultados y lo que verdaderamente se enseña, siempre he recibido el apoyo de las familias, siempre digo que estas vías lo que necesitan es visibilizar estos sistemas.

 

Ya con el apoyo de las familias, ¿cómo lo implementó?

Al principio del trimestre me reuní con los padres y compañeros para explicar lo que íbamos a realizar en el aula, cuando explicas porque se trabaja así, que buscas y qué resultado van a obtener sus hijos. 

Lo que busco así es que las cosas no están hechas ‘porque sí’, si explicas todo con detalle recibes el apoyo de las familias. 

 

Teniendo en cuenta la repercusión de su modelo, ¿sería complicado adaptar proyectos como este a otros docentes?

Para poder implementar estos sistemas lleva muchas horas, horas que no son de trabajo remunerado y está condicionado a que mucha gente no tiene tiempo a poner en marcha estos proyectos y tiene un esfuerzo personal muy grande, que no todo el mundo hace pero, porque no tiene la obligación de hacerlo, yo creo en una educación así, disfruto dando estas clases, y mientras tenga tiempo, ganas y capacidad voy a seguir dándolo de esta manera.

 

¿La iniciativa de proponerle para el concurso fue de los niños, las familias...?

Fueron las familias, alguien conocería el certamen y decidieron inscribirme, por sí mismo la participación es muy sencilla, solo tienen que apunta al profesor en una página web, pero no implica que esté nominado. 

De hecho, este año en concreto se han presentado más de mil docentes, y un comité es el encargado en discernir quiénes serán los 50 nominados.

 

¿A usted para qué le sirve o en que le ayuda la nominación para este premio?

Por un lado estoy recibiendo el cariño de las familias, a las que les gusta mi método y por otro lado es un espaldarazo al saber que alguien del mundo educativo de valor a tu trabajo al ser seleccionado entre tantos profesores, que también tendrán grandes métodos de enseñanza y muchos más que no están nominados que tienen grandes modelos de enseñanza.

 

¿Aspira a llevarse el galardón este año? y, ¿qué consigue por ganar?

Es un premio principalmente simbólico, recibes el reconocimiento, existe una bonificación de mil euros por ser elegido el mejor. Recibes un diploma que certifica tu nominación, pero lo vital es la puesta en valor del trabajo que realizamos, el cariño de compañeros, alumnos y sus familias y que al final de todo ves que tus métodos tiene una utilidad real y un valor añadido para su educación. 

Pero a nivel administrativo, no tiene ninguna repercusión, el concurso es llevado a cabo por una institución privada y no por ganar conseguiré un ascenso o la plaza fija, reía Alejandro.