El Consejo de Ministros dio luz verde al acuerdo, a petición del Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, por el que se autoriza la celebración del contrato de ejecución de las obras del proyecto constructivo de la playa de mercancías del complejo ferroviario y su conexión con la red arterial ferroviaria de Valladolid, por un valor estimado de 28,4 millones de euros.
Con este proyecto, Valladolid se convertirá en un centro neurálgico para el transporte de mercancías hacia el noroeste del país y viceversa. Este nudo logístico se ubicará en una estación para el transporte de mercancías cerca de los talleres de Renfe en el Páramo de San Isidro, que asumirá todas las operaciones con trenes de carga que ahora pasan por la terminal de Campo Grande y por la Esperanza. También será el punto de salida para los trenes que transportan los vehículos de Renault por la línea de Ariza.