El alcalde de Valladolid, Óscar Puente, destacó hoy que la remunicipalización de la gestión del agua en Valladolid, que cumple cinco años, fue una decisión "plenamente acertada y que nadie puede contradecir con ningún argumento sólido" porque el precio del agua lleva congelado un lustro, la plantilla se ha mantenido y los beneficios de Aquavall se han reinvertido en mejorar toda la infraestructura de abastecimiento, con más de 50 millones licitados, frente a los 27 en 20 años de privatización.

Puente ensalzó la "valentía" de tomar esa decisión en un momento con unas "tensiones terribles" pero sentenció que "el tiempo nos ha dado la razón". "Es un alivio pensar que los ciudadanos tras cinco años están mucho mejor en esta materia", enfatizó.

Óscar Puente, que compareció acompañado por la concejala de Medio Ambiente y presidenta del Consejo de Administración de Aquavall, María Sánchez, recordó que el 30 de diciembre de 2016, el pleno aprobó la creación de la entidad pública para la gestión integral del ciclo del agua, y el 1 de julio de 2017 "se hizo efectiva la remunicipalización"

El regidor recordó que camino recorrido "no ha sido fácil" y expresó que fue una "decisión compleja que tuvieron que justificar muy bien" y requirió mucho tiempo con hasta doce procedimientos judiciales y sentencias que avalaron el paso dado por el Ayuntamiento.

"Cinco años es tiempo suficiente para hacer balance del funcionamiento de una decisión política", dijo, para insistir en que de esa evaluación se deduce que "sí fue correcta" por sus consecuencias.

Así, frente a los que defendieron que era una mala decisión porque el precio del agua "se iba a encarecer", tras cinco años, recordó, los precios están congelados, cuando se encarecieron casi todos los ejercicios cuando estaba en manos privadas.

Asimismo, espetó a los que afirmaron que las plantillas corrían riesgo, que todos los trabajadores que estaban entonces siguen trabajando hoy para Aquavall. "La justicia nos ha dado la razón en todo, los precios del agua se han congelado y los trabajadores siguen en sus puestos", resumió.

El primer edil también contrapuso los 5,6 millones de euros que ingresaba el Ayuntamiento como canon de gestión de la empresa privada, a los 13 de beneficios que genera hoy en manos públicas, y que revierten "íntegramente" en todo lo relacionado con el ciclo del agua.

En este sentido, expuso que "la red estaba muy obsoleta y la estamos renovando y mejorando" con una "inversión muy importante". Al respecto, María Sánchez concretó que en estos años, han licitado 50,3 millones de euros en Aquavall, han adjudicado 45,9 y ejecutado 34,1 millones, con un plan de obra este ejercicio de ocho millones de euros, frente a los 27 destinados por la empresa privada en 20 años.

La concejala explicó que cuando asumieron la gestión del agua se encontraron con un déficit de inversión "muy fuerte", de unos 97 millones de euros, pero gracias a la asunción de la gestión pueden reinvertir ahora los beneficios, lo que les ha permitido mejorar o renovar ya 95 kilómetros de redes, 57 de ellos con tecnología sin zanja, una técnica que pretende afianzar. Vaticinó en este sentido que en 15 años estarán todas las redes saneadas y dejará de haber reventones y preciso que hasta la fecha han actuado sobre el 15 por ciento de las redes de fibrocemento. Aseveró que también invirtieron 7,3 millones en mejora de la calidad del agua y eficiencia energética, y destinaron fondos a renovar la flota para vehículos eléctricos.

Sánchez remarcó su apuesta por las tarifas sociales y por la responsabilidad corporativa con un programa de concienciación sobre el consumo; y una apuesta por la transparencia, con un refuerzo de la atención ciudadana con más horario, una oficina virtual y el refuerzo de la atención telefónica. "Esta engrasada la maquinaria y Aquavall tiene mucho futuro como referente entre las empresas de gestión del agua", sentenció.

Modelo diferenciado.

Punente garantizó que la sociedad seguirá siendo pública mientras el PSOE esté en el Gobierno municipal y destacó su "modelo diferenciado frente a otras alternativas" como las del PP, porque "los bienes y servios públicos deben ser gestionados de forma pública preferentemente, a no ser que no sea posible".

Óscar Puente resumió que hoy gracias a la remunicipalización "los ciudadanos de Valladolid son más ricos que hace cinco años", con unos beneficios que permiten invertir en las redes, sin daño en sus bolsillos y con bonificaciones para las personas que más lo necesitan.

"Se puede gestionar mejor desde lo público, garantizando un servicio básico y con más beneficios para los ciudadanos", dijo, para apelar también a asumir los aparcamientos públicos porque "el beneficio de estos servicios se debe reinvertir en los ciudadanos" frente a los que piensan de "forma muy distinta", como en Madrid, dijo, que "deben estar en manos privadas y generar beneficios privados". "Nosotros no lo creemos así", resumió