La obra del Camino Viejo se para por problemas de la empresa

M. Rodríguez
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Gecocsa, la beneficiaria del contrato de 1,7 millones para renovar 2,7 km de la vía, está en preconcurso de acreedores. También renuncia a ejecutar el carril bici de Isabel la Católica

Obras paradas en el Camino Viejo de Simancas. - Foto: Jonathan Tajes

La urbanización del Camino Viejo de Simancas y la construcción de nuevos itinerarios peatonales y de bicis, incluida la mejora de la iluminación y la instalación de nuevo mobiliario urbano se ha paralizado por los problemas económicos de la empresa concesionaria. Gecocsa resultó beneficiada, en abril de 2023, del contrato de obras para urbanizar 2,7 kilómetros. La intervención se centra en el tramo que va desde la VA-30 hasta el límite con Simancas. Una obra con un presupuesto de 1.660.929 euros y nueve meses de plazo de ejecución.

Esta reforma comenzó en julio del año pasado, pero los trabajos se frenaron la semana pasada cuando la empresa salmantina entró en preconcurso de acreedores, un tiempo extra previo a pedir la intervención judicial. «Esta situación motiva que no haya abandono como tal de la obra, pero los trabajos están parados. Acude un encargado y un peón, además de realizar nosotros visitas semanales para garantizar la seguridad en la vía», explica Ignacio Zarandona, concejal de Urbanismo. 

Esto implica que la obra que ya debía estar terminada se demore sin fecha concreta de finalización. El Ayuntamiento mantiene conversaciones con la empresa para que esta pueda «ceder» el contrato a otra que pueda terminar la reforma. Aunque, según fuentes consultadas por El Día de Valladolid, dos ya han declinado hacerse cargo y apuntan que sería necesario un modificado del presupuesto.

Los problemas económicos han motivado que Gecocsa haya renunciado también a la adjudicación del contrato para la construcción del nuevo carril bici en Isabel la Católica. Así figura en el acta de la Mesa de Contratación del pasado 24 de abril, donde se recuerda que la firma salmantina era la elegida inicialmente para la ejecución al haber rebajado el coste de 766.669 euros a 661.099.

La decisión de no firmar el contrato deriva de que la sociedad no presentó en el plazo previsto la documentación justificativa de su capacidad y solvencia, de disponer efectivamente de los medios que se hubiese comprometido a dedicar o adscribir a la ejecución del contrato; y de haber constituido la garantía definitiva que sea procedente. Motivo por el que se le exige el importe del 3% del presupuesto base de licitación en concepto de penalidad.

Ahora se propondrá la adjudicación a la UTE conformada por Vilor SL y Martín Holgado Obra Civil, que presentó una oferta económica de 670.069,00 euros (más IVA). El Ayuntamiento mantiene la previsión de que los trabajos comiencen en junio.