Las obras de tres infraestructuras de alta velocidad ferroviaria en Castilla y León suman nuevos retrasos, pese a su avanzado estado de ejecución. El Ministerio de Fomento no ha cumplido con el calendario que había marcado a principios de año para la Variante de Pajares y la línea Valladolid-Venta de Baños-León, ya que tenía previsto licitar en septiembre el montaje de vías y la electrificación para rematar las últimas actuaciones pendientes. Tampoco ha dado luz verde al contrato de las instalaciones de seguridad del tramo Olmedo-Zamora del corredor gallego.
Todos estos trabajos, según había comprometido la ministra de Fomento, Ana Pastor, en sus intervenciones parlamentarias, se iban a contratar entre julio y septiembre a través del modelo de colaboración público-privada. Sin embargo, la licitación de estas obras no recibieron el visto bueno en la reunión del Consejo de Administración de Adif (Administrador de Infraestructuras Ferroviarias) celebrada el pasado viernes. Además, el próximo consejo no está previsto hasta el 25 de octubre, ya que suelen celebrarse el último viernes de cada mes.
Por tanto, la puesta en servicio de la Variante de Pajares (49,7 kilómetros entre La Robla y Pola de Lena), que se abrirá al tráfico con un sólo túnel y en ancho ibérico, continúa bloqueada, alargándose aún más los trabajos en este paso subterráneo bajo la Cordillera Cantábrica, cuya primera dovela se colocó hace nueve años en Pola de Gordón (León). Aunque las perforaciones terminaron en 2009, las continuas filtraciones y deslizamientos han complicado el avance de los trabajos, que encontraron también la barrera de la crisis y la escasez de recursos.
Fomento pretendía que entrara en servicio en 2014, ya que trabajaba con la posibilidad de contratar a principios de 2013 las obras de montaje de vía para que un año después estuvieran listas. Ya en mayo, el secretario de Estado de Infraestructuras, Transporte y Vivienda, Rafael Catalá, pospuso para julio el contrato de la electrificación y señalización. El expediente de la catenaria cumplió este último plazo, no así el resto que están a la espera de recibir la autorización del Ministerio de Hacienda, ya que la inversión prevista ronda los 40 millones de euros.
Valladolid-León. Asimismo, los 162 kilómetros de la línea entre Valladolid y León continuará unos meses más sin vías, catenaria y sistemas de seguridad y comunicaciones. Fomento aseguró que a finales de septiembre se licitarían mediante el modelo de colaboración público-privada estos trabajos, necesarios para reactivar las obras de este corredor que llevará la alta velocidad hacia el norte. La plataforma lleva ya varios años prácticamente finalizada, a la espera de que Adif contrate el resto.
Pastor aseguró hace cuatro meses que el Gobierno trabaja para finalizar «cuanto antes las obras del AVE a León» y añadió que este año este tramo ha contado con 215 millones, que según recordó, se suman a los 134 millones invertidos en 2012 para finalizar la plataforma, sobre la que se colocan las vías, raíles y sistemas eléctricos.
El Ministerio ya no da fechas para su puesta en servicio, prevista por el anterior gobierno para finales de 2012, con el objetivo de unir León con Valladolid en menos de una hora y la capital leonesa y Madrid en unos 120 minutos. Cinco años después de iniciarse las obras, presupuestadas en 725,7 millones, la línea acumula un sobrecoste de unos 250 millones. Actualmente, los trabajos se centran en el nudo de Venta de Baños.
Olmedo-Zamora. Igualmente, septiembre era la fecha dada por Fomento para licitar el sistema de seguridad y comunicaciones del tramo Olmedo (Valladolid)-Zamora de la Línea de Alta Velocidad a Galicia. El Ministerio había previsto recurrir a la fórmula de la colaboración público-privada para acometer estas obras, los últimos trabajos pendientes para poner en servicio estos 95 kilómetros que se conectarán con el tronco del corredor norte que parte de Madrid.
De momento toca esperar, aunque todos estos trabajos pendientes tendrán una nueva oportunidad el próximo 25 de octubre cuando vuelva a reunirse el consejo de administración de Adif para aprobar nuevas actuaciones.