La construcción del nuevo complejo ferroviario superan el 95 por ciento de su ejecución. La Sociedad Valladolid Alta Velocidad ha confirmado este extremo, al tiempo que ha adelantado que en los próximos dos meses se rematará la obra civil, que además está vinculada directamente con la instalación de la nueva maquinaria. Algo más retrasado, derivado de la correspondiente contratación administrativa, está la variante de mercancías, el ramal norte que conecta el corredor del by-pass con las nuevas dependencias para permitir la entrada de trabajo al nuevo complejo mediante vía ferroviaria. Y es que esta matización es importante, como remarcan desde el organismo público, porque durante las primeras semanas de puesta en marcha de los nuevos talleres está garantizada la carga de trabajo de unos convoys que llegarán vía carretera, sobre camiones. Así las cosas, las imágenes del avance de los trabajos hablan por sí solas ante la espectacularidad y magnitud de las naves que ocupan una superficie total de setenta hectáreas y cuya inversión superará los 141 millones de euros.
En concreto, la consecución de las obras del nuevo complejo ferroviario, situado en el Páramo de San Isidro, está prevista para el mes de marzo, con varios meses de retraso sobre los plazos previstos que estaban calculados para el pasado otoño. Ahora los remates avanzan a toda maquina para tener todo apunto antes de la primavera y poder iniciar la mudanza de los actuales talleres de Campo Grande a San Isidro antes de verano. Un cambio, precisamente, que se prolongará durante los seis meses siguientes, por lo que la mencionada sociedad (integrada por el Ministerio de Fomento, la Junta de Castilla y León y el Ayuntamiento de Valladolid) estima que los nuevos talleres de Renfe pudieran estar funcionando a pleno rendimiento antes de terminar el año.
Los nuevos talleres, según han apuntado empresa, proveedores, sindicatos y los propios trabajadores que ocuparán su espacio, serán los más modernos y amplios de una compañía ferroviaria en Europa, una circunstancia que redundará en un incremento de la carga de trabajo, en especial de maquinaria de alta velocidad. Así, este complejo albergará la Terminal de Mercancías y el Taller Central de Reparaciones de Renfe y la previsión es que en un futuro también se instale aquí Redalsa.