La falta de recursos económicos y las desigualdades sociales son, para muchos, la mayor lacra que azota el planeta en pleno siglo XXI. Un problema de dimensiones astronómicas que no deja indiferente a nadie y tampoco a las instituciones comunitarias. Por ello, el presidente del Parlamento Europeo, Martin Schulz, alertó ayer, Día Internacional de la Pobreza, sobre el riesgo de que haya «otra generación perdida» a causa de las elevadas tasas de necesidad infantil que hay en el sur de Europa.
Así, Schulz explicó que los niños que ahora sufren falta de recursos perpetuarán la «actual generación perdida de jóvenes trabajadores», e instó, por ello, a entidades e instituciones públicas a evitar este fenómeno.
«Si conseguimos salvar los bancos europeos, podemos y tenemos la obligación moral de proteger a los más joven», aseveró, recordando, además, que la defensa de la infancia es uno de los mayores desafíos de los Gobiernos europeos.
«NO SE VA A DAR EN ESPAÑA» En respuesta a la advertencia formulada por el presidente del Parlamento Europeo, el secretario de Estado de Servicios Sociales e Igualdad español, Juan Manuel Moreno, descartó el riesgo para el país de una generación perdida y aseguró que ésta se está reduciendo, ya que la propia España se encuentra «en plena recuperación».
«Tiendo a ser optimista y creo no se va a dar esta situación en nuestro país, porque hay síntomas de mejoría: hay un 0,2 por ciento de reducción de pobreza», puntualizó Moreno, basándose en el último informe de Arope de 2012.
No obstante, el secretario de Estado desveló que las cifras de pobreza infantil siguen siendo «estremecedoras» (26 por ciento de los menores españoles, según Cáritas), y avanzó que el Ejecutivo «siempre se preocupará» por afrontar un problema tan atróz mientras haya «una sola familia» pasándolo mal.
Por ello, apuntó que para 2014, el Ejecutivo va a destinar 211 millones de euros -a través de los fines sociales con cargo al IRPF- para favorecer la inclusión social, con el objetivo de que «nadie se quede absolutamente descolgado». De este montante, prevé unos 30 millones de euros vayan para la erradicación de la pobreza infantil, aunque esta decisión está en manos de las organizaciones sociales.
Asimismo, Moreno informó que para finales de este año, su departamento aprobará el Plan de Inclusión Social con medidas «coordinadas» para el conjunto de las administraciones públicas para «intentar evitar el riesgo de exclusión en el que están ahora «muchos españoles».
De igual modo, el responsable estatal de Servicios Sociales aprovechó para expresar la «absoluta solidaridad» del Gobierno con aquellos que en estos momentos lo están pasando mal, «especialmente» los niños que por la crisis se ven en una situación de «cierta penumbra económica y social», así como su apoyo sincero a las entidades que trabajan «día a día por todos los rincones del país para lograr mejorar la calidad de vida de los más vulnerables».