La incertidumbre que pesaba sobre la situación financiera de Grupo El Árbol se disipó ayer con el anuncio de la compra por parte de Grupo DIA. La empresa madrileña comunicó que ha suscrito un acuerdo para comprar el cien por cien del capital social de la vallisoletana. Una operación que se ha cerrado por un valor simbólico de un euro, aunque el coste real se deriva de las deudas que hasta ahora ahogaban a El Árbol y que asumirá DIA.
Por lo pronto, la compañía madrileña tendrá que hacerse cargo de la amortización de un préstamos participativo previamente concedido a El Árbol. Esta deuda consta de dos partes. Una fija, que ronda los 26 millones de euros, y una variable que está ligada a «determinadas magnitudes financieras» y que puede llegar a un importe máximo de 25,8 millones. No obstante, fuentes de DIA señalaron a este periódico que esta cifra es susceptible de modificarse, siempre a la baja. Y podría hacerlo en el periodo de tiempo que pasará hasta que la Comisión Nacional de Mercados y la Competencia se pronuncie sobre la operación. Las previsiones de DIA es que lo haga antes de fin de año.
Además de esos casi 52 millones procedentes del préstamo participativo, DIA también asumirá una deuda financiera que está estimada en un máximo de 99 millones de euros. Unos 150 millones en total a los que habrá que añadir otros 7,5 procedentes de una línea de financiación que DIA facilitará a El Árbol para asegurar «el normal funcionamiento de la empresa» en este periodo de transición.
Aunque la empresa compradora no espera ninguna objeción por parte de Competencia, existe la posibilidad de que este organismo obligue a desprenderse a algunos supermercados, como ya sucedió en otras ocasiones anteriores. De concretarse esta operación, los 455 establecimientos comerciales que El Árbol tiene principalmente en Castilla y León, Asturias, Aragón, Extremadura y Galicia pasarán a manos de DIA.
Eso sí, los nuevos propietarios ya han anunciado su intención de mantener la marca El Árbol, si bien todavía no hay una decisión tomada sobre el mantenimiento de la sede social en Valladolid o su traslado a Madrid. «Ahora mismo ni nos lo hemos planteado, cuando tengamos el dictamen de Competencia y nos hagamos con el control, estudiaremos la situación», señalaron ayer desde DIA a este periódico. En el comunicado difundido la empresa dice que mantendrá «el compromiso histórico de la cadena El Árbol con Castilla yLeón, donde está ubicada su sede (Valladolid), sin olvidar su presencia en otras comunidades.
Cabe destacar que El Árbol da empleo a unas 7.000 personas en España (datos de 2012), de las que unas 2.300 trabajan en Castilla y León. Ahora se abre un periodo de incertidumbre para todos ellos, aunque DIA ya ha avanzado que pretende aprovechar «las fortalezas» de El Árbol, en especial en el desarrollo de la oferta de productos frescos, uno de los fuertes de El Árbol. Por lo pronto, ya ha asegurado que el pago de los proveedores está garantizado.
Desde DIA señalaron ayer que El Árbol tenía «importantes dificultades económicas» y su intención es hacer a esta empresa «viable y rentable», aunque cualquier movimiento se empezará a plantear una vez que Competencia autorice la operación. En este sentido, El Árbol estaba inmerso en la elaboración de un plan estratégico para los próximo tres años que precisaría una inyección económica de diez años.
El 40 por ciento del accionariado de El Árbol estaba en manos de Madrigal Participaciones, la sociedad de inversión conjunta de las antiguas cajas de Castilla yLeón, un 30 por ciento pertencía a Castellana de Capital de Inversión, un 20 por ciento a Empresarios Integrados (formada por el presidente de Grupo Norte, José Rolando Álvarez, y Fernando Martín, de Martinsa.
El acuerdo entre DIA y El Árbol se produce después de que a finales del año pasado se produjesen algunas negociaciones que al final no llegaron a buen puerto, tal y como informó la empresa madrileña en su día a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV)