El alcalde de Valladolid, Javier León de la Riva, ha pedido por carta al presidente de Renfe, Javier Gómez-Pomar Rodríguez, la restitución del tren Francisco de Goya, que une Valladolid con París, y la programación de conexiones oficiales entre los trenes con origen y destino en la frontera. En la misiva, a la que ha tenido acceso Europa Press, el alcalde de Valladolid ahonda en el carácter «unilateral» de la decisión así como en la «alta» ocupación y frecuencia de los desplazamientos para pedir la restitución de la programación del tren Francisco de Goya y mantener así la conexión de Madrid y Valladolid con París a través del paso Irún-Hendaya.
Tras sugerir la posibilidad de modificar la frecuencia de este tren pero no de eliminarlo totalmente, León de la Riva propone, de manera complementaria y para su adopción de manera «simultánea» la programación de conexiones oficiales entre los trenes con origen y destino en la frontera a fin de agilizar los enlaces. El alcalde basa su defensa del Francisco de Goya en la posición geográfica de la ciudad; el uso que del mencionado tren hacen, además de viajeros individuales, las empresas radicadas en la ciudad con intereses en el mercado francés (Renault, Michelín o Panibérica de Levadura) y colectivos académicos vinculados a la lengua y cultura francesa, y el «mantenimiento» de la economía de Valladolid de mano de las empresas locales que vendían los billetes.
En su carta, el regidor establece una comparación con el recientemente puesto en marcha servicio de alta velocidad entre Madrid, a través de Barcelona, y París, que recorre 1.350 kilómetros frente a los 1.150 que median entre Valladolid y la capital gala, a lo que suma el hecho de que los vallisoletanos que tengan que optar, ante la desaparición del tren, por la alta velocidad sumarán los kilómetros y tiempo correspondientes al trayecto entre su ciudad y la capital de España.
«Es evidente, por tanto, que en tiempo y en distancia resulta poco operativo ofrecer a los ciudadanos de Valladolid la conexión con Francia a través de la frontera catalana», esgrime el alcalde, quien añade que, además, la opción de la alta velocidad obliga a comprar tres billetes (Valladolid-Madrid, Madrid-Barcelona y Barcelona-París), «haciendo dos transbordos y un cambio de estación».