Alberto Bustos repite una y otra vez que la ciudad se debe de construir con la participación y la aportación de todos los vecinos. Esta es la filosofía que quiere imponer en la Concejalía de Participación, pero también en las áreas de Juventud y Deportes que en este mandato han pasado a estar bajo su batuta. El concejal de Valladolid Toma la Palabra (VTLP)anuncia que en septiembre las asambleas abiertas que se realizarán en los barrios serán la visualización más claras de las políticas el nuevo equipo de Gobierno, que también realizará consultas ciudadanas para decidir los temas claves para el futuro de Valladolid.
Su Concejalía engloba tres áreas un tanto dispares. Después de más de un mes al frente de ella, ¿ha conseguido ordenarla ya y fijar prioridades?
Es complicado. El tema de Participación Ciudadana y Juventud es un ámbito muy cercano, que está muy relacionado. En el tema de los jóvenes intentaremos que se impliquen en la sociedad, que apuesten por asociarse y abordar los problemas fundamentales que tienen. En esto entendemos que cuadrará muy bien Participación y Juventud. En el área de Deportes, la responsabilidad social que tiene encaja bien en la Concejalía de Participación, pero sí que es cierto que la dinámica propia de la Fundación Municipal de Deportes tiene un ritmo, un buen funcionamiento y ha costado menos asentarnos en este tema, que está funcionando con bastante facilidad. Luego hay otro tipo de ámbitos en la Concejalía, como es la parte de atención ciudadana, registro, sugerencias y reclamaciones o el 010, además de la parte de Informática, donde hay que buscar un encaje con el resto.
¿Es un poco un cajón desastre esta Concejalía?
No. Creo que tanto no. Es una Concejalía que tiene mucho sentido porque de lo que se trata es de reforzar un ámbito, que ha estado muy abandonado en los últimos años, que es del protagonismo de la ciudadanía. Se trata de que la ciudadanía de Valladolid, desde el ámbito de la participación, sea protagonista de los cambios que tiene que hacer la ciudad. Esta ciudad tiene un potencial muy grande, con mucha gente implicada en los barrios, y eso no se ha aprovechado hasta ahora. Es más, se han puesto políticas contrarias a que la gente pudiera aportar para sumar a la ciudad. Y ahora queremos hacer lo contrario. Por eso la Concejalía tiene mucho sentido.
¿Cómo se notará ese cambio de políticas y ese fomento de la participación? ¿Cómo influirán esas aportaciones en las decisiones del equipo de Gobierno?
Se notó nada más entrar, en un ámbito muy concreto, cuando la Noche de San Juan, que es una fiesta popular, aquí estaba prácticamente la parte institucional. Se habló con diferentes organizaciones para intentar colaborar en la organización y se hizo sin ningún problema. Y salió muy bien, incluso podemos decir que hasta quedó más limpio el espacio. Se fue sumando gente para incorporarse a algo que debe ser de los vecinos. Es un primer ejemplo, pero lo vamos a notar en las diferentes fiestas que organicemos; en los espacios como los Consejos Municipales, en los que daremos un mayor protagonismo a las organizaciones y se notará en la apertura del Ayuntamiento a la administración electrónica para facilitar las gestiones que tenga que hacer cada vecino de la ciudad. Creo que se notará la participación de cada ciudadano en el crecimiento de la ciudad, pero también en la cercanía a la administración. Y se está notando mucho en la transparencia. Desde el primer día cada concejal está diciendo lo que hace a lo largo de todo el día. Se irá mostrando cada factura que se gasta, que es muy importante. Se notará mucho a partir del mes de septiembre cuando empecemos a hacer asambleas abiertas en los barrios. Iremos todo el equipo de Gobierno expuestos a que la ciudadanía pregunte, opine, critique y construya en cada barrio.
Pero, ¿esas asambleas serán como los Concejos Abiertos que se realizaban hasta ahora?
La diferencia será que habrá más. Habrá una dinámica por la cual se va a estar durante este mandato en todos los barrios y seguramente en muchos de ellos en más de una ocasión. Y se notará en cuanto al protagonismo de los vecinos en la propia asamblea. Ya no será algo hecho a la medida de un alcalde, que va con un tema preparado y contesta a los vecinos él. Implicará a todo el equipo de Gobierno y a las asociaciones vecinales. Habrá una preparación previa también para los vecinos para que puedan plantear qué temas quieren trabajar y habrá una dinámica de asambleas verdaderamente participativas para los ciudadanos.
¿Las decisiones que se adopten serán vinculantes?
Serán vinculantes si son posibles. Sería muy fácil para mí decir que en una asamblea todo lo que diga cualquier vecino se va a hacer. Se tratará de que sea vinculante siempre y cuando entre dentro de lo posible. También se notará en que el día después de esa asamblea se podrá hacer un seguimiento de los temas abordados. No se quedará como un compromiso que queda en el aire sino que cada vecino podrá hacer un seguimiento de cada tema que se ha acordado en asamblea. Se podrá seguir en la web municipal, podrá venir a preguntar al concejal responsable o los técnicos,… Luego hay cosas que no son fáciles de poner en marcha, pero cada vecino sabrá en qué momento está su reivindicación.
Tanto PSOE como VTLP anunciaron en sus programas que realizarían consultas ciudadanas sobre temas importantes. ¿Se ha decidido ya cuál será la primera consulta que se hará?
Tenemos que ir concretándolo. Hay un tema muy importante de ciudad, que es el soterramiento, y en principio es uno de los temas que queremos ir abordando y debatiendo con los vecinos, y que es posible que se lleve a consulta, pero no es una decisión tomada todavía sobre cuándo será. Lo que se lleve a consulta será un tema transcendente de ciudad. No llevaremos a consulta cualquier nimiedad para lavarnos la cara con eso.
Siempre se ha dicho que una para del asociacionismo de la ciudad está vinculado a los partidos que ahora forman el equipo de Gobierno, ¿cómo van a gestionar estos mecanismo de participación para que no les acusen de favoritismos? ¿Se ha reunido ya con las dos federaciones de vecinos?
No creo que haya una parte del asociacionismo vinculado al equipo de Gobierno. Creo que fue algo que utilizó el anterior alcalde como un mantra. Desde la Federación de Vecinos Antonio Machado y algunas asociaciones están críticas y propuestas al equipo de Gobierno sin ningún problema. Y es bueno que sea así. Además, a los pocos días de ser nombrado concejal me reuní con las dos federaciones y lo que trataremos es trabajar por todas las asociaciones. Y aquí a nadie se le va a preguntar ni qué piensa, ni cuál es su ideología, ni qué ha votado. Y a nadie se le señalará como se trataba de hacer desde el anterior equipo de Gobierno. La ciudad hay que construirla entre todos, y cualquier persona u organización que esté trabajando en su entorno será bien recibida o le demandaremos que se sumen los esfuerzos para que aporten ideas y propuestas. Se trata de hacer ciudad entre todo el mundo, barrio a barrio.
El nuevo equipo de Gobierno hace especial hincapié en el trabajo conjunto de las Concejalías. En este sentido, ¿qué tienen planteado junto a la Concejalía de Cultura para evitar el botellón en ferias en Las Moreras?
En breve tendré una reunión con Arva para abordar este tema. Cuando hablamos de problemas de drogodependencias me gustaría que no se centrara sólo en el ámbito juvenil. Sí que he hablado con la concejala de Cultura para intentar en el espacio de las fiestas, además de trabajar el ámbito paliativo y preventivo, hacer la programación sea muy propositiva. Que sean fiestas que lleguen a un sector muy abandonado, muy huérfano, como ha sido el de los adolescentes entre los 12 y los 16 años. Es un sector crítico cuando hablamos de este problema. Nos parece que, en general, la política municipal respecto a la oferta cultura y de ocio no ha contemplado este sector.
¿Cómo se puede solventar esta carencia?
Pasamos de actuaciones en centros cívicos para niños a personas mayores; pasamos de fiestas dirigidas a niños, mayores o jóvenes, pero casi nunca para adolescentes o preadolescentes; pasamos de un parque infantil a un parque con aparatos para la tercera edad, y casi nunca se acuerda de este sector fundamental. Es una edad crítica para la prevención del uso y abuso de sustancias nocivas. Sí que vemos que en las fiestas haya espacios dedicados a estos chavales o que haya políticas dirigidas desde el ámbito de la juventud específicas para los adolescentes. Queremos que los programas de ocio alternativo no sean unos programas que se paran en el tiempo o una suma de actividades inconexas. Queremos que sean programas anuales de ocio alternativo, que van a servir para que realmente se vea una alternativa más allá del consumo del alcohol y otras drogas. Como administración nuestra responsabilidad es ofrecer una alternativa al ocio de estos jóvenes.
Durante el anterior mandato reclamaron al Ayuntamiento una apuesta decidida por el deporte base. ¿Cómo se notará en este nuevo ciclo su apuesta por esta categoría con protagonismo de los más jóvenes?
Se va a notar de una manera muy importante. Estamos teniendo contactos con equipos de base y con los de elite, y también nos hemos reunido también con las Ampas con la intención de convertir el deporte en un hábito para los más jóvenes. Un hábito saludable, sea o no sea competitivo. Queremos que no hay un sólo colegio en el que no haya deporte. Queremos extender el deporte escolar a los 12 o 14 colegios que hoy no lo tienen. En esto queremos implicar a los clubes de elite y las federaciones. Tenemos un proyecto muy interesante con la Asociación de la Prensa Deportiva para colaborar en extender diferentes deportes en todos los centros. Estamos trabajando con los clubes de bases y las federaciones para reforzar su actividad. Reforzarla económicamente pero también en cuenta a la organización de eventos que atraigan gente a Valladolid y que motiven a los jóvenes a practicar el deporte.
El Ayuntamiento está revisando las ayudas a los clubes de elite y al resto de los clubes. ¿Qué baremos se van a poner finalmente y cuándo se conocerá la cuantía de las subvenciones?
Los convenios actuales finalizan el 31 de diciembre. Ya me he reunido con todos los clubes que han pedido una reunión, que son la mayoría. El planteamiento que hemos expuesto es que tenemos que vincular las ayudas del deporte de elite a la responsabilidad social de los clubes. Una administración tiene que aportar a una entidad en función de la repercusión que tenga sobre la ciudad. En este caso nos planteamos que tiene que tener responsabilidad social y queremos implicar a los clubes en el desarrollo del deporte de base. Queremos que los clubes desarrollen la base y que con chavales de Valladolid hagan un trabajo, que no deja de ser promoción deportiva pero también educativa. También queremos impulsar más el deporte femenino y que las mujeres tengan espejos en el deporte de elite para poder mirarse. Queremos que los clubes puedan desarrollar campus deportivos en el verano que puedan acoger chavales, que algunos a lo mejor no pueden pagárselos. Esa es la repercusión social. Y queremos ir más allá de lo que se fomentaba habitualmente que era la difusión de la imagen de la ciudad, que está bien, pero quermes una repercusión directa, medible y lo más objetiva posible.
¿Eso implica que habrá recortes en las ayudas a algunos clubes para equilibrar entre todos?
Hay dos partes. Una es el posible recorte, que es posible que lo haya en la cantidad global que antes se dedicaba al deporte de elite. Pero es que prácticamente todas las subvenciones municipales durante los últimos cuatro años se han disminuido como mínimo un 30%, y hablamos de ayudas fundamentales. Entonces, si se ha disminuido ese porcentaje en temas básicos para los ciudadanos nosotros siempre defendimos que no era razonable que el deporte de elite mantuviera las cifras que tenía, sin bajar un céntimo, porque el deporte base sí que bajó. El deporte de base, en los barrios estuvo bajando; en el deporte escolar no ha habido las ayudas necesarias;...Entendemos que el deporte de elite, cuyos convenios se aprobaron en 2011 para cuatro años, le toca ahora ponerse un poco en situación pareja con el resto de la ciudad. No es nada especial. Lo queremos apoyar pero entendemos que hay una situación de desigualdad.
¿Quiere decir esto que va a bajar un 30 por ciento?
No. Seguramente haya un recorte en números globales y dentro de ese recorte habrá que hacer un cierto equilibrio. Había clubes que estaban casi maltratados. Con muy poco aportación. Y nos hemos encontrado con la situación del baloncesto, muy conocida por todos, que estaba llevándose unas cantidades que no eran razonables, ni por la aportación que era ni por la forma en la que se hacían.
En el caso de disolución del CB Valladolid, ¿qué responsabilidad subsidiaria tendría el Ayuntamiento?
El accionariado del Ayuntamiento ahora mismo está entre un 1,6 y un 1,7%. Los responsables del club ya han manifestado que la viabilidad es complicada. Si entra en disolución veremos si el Ayuntamiento tiene o no tiene alguna responsabilidad. No los sabemos. Lo que sí que sabemos que si lo que se ha hecho ahora se hubiera hecho hace unos años esta situación estaría ya solucionada. Sin embargo, se ha ido alargando el problema durante años. Nosotros hemos decidido que hay atajarlo.
¿Habrá baloncesto de elite la próxima temporada en Valladolid?
Entiendo que sí. Lo que nos preocupaba mucho es que siguiera habiendo baloncesto en la ciudad y parece que lo va a haber. Hay un proyecto que ya ha sido admitido en LEB Plata, encabezado por Mike Hansen. Nos preocupaba que este proyecto pudiera acoger a centenares de cantera que podían estar en el CB Valladolid y que fuera un espejo para los chavales que estén en otros clubes, además de que hubiera una referencia de baloncesto en una ciudad en la que hay mucho aficionado. Parece que el proyecto tiene bastante solvencia y entiendo que sí que habrá baloncesto.
¿El Valladolid Arena está definitivamente enterrado?
El Valladolid Arena no lo entierra el Ayuntamiento, es la Justicia la que dice que no era legal. Desde mi partido no somos contrarios a desarrollos deportivos pero sí que entendemos que la parte de desarrollo comercial no tiene encaje en el Valladolid de hoy. Nuestra apuesta está porque no haya más grandes superficies en la ciudad porque ya hay una dotación muy importante. Queremos apostar por un desarrollo coherente. Personalmente creo que aquel proyecto hoy es muy difícil de poner en marcha.