Nueve pueblos desaconsejan el consumo de agua por los altos niveles de arsénico y turbiedad

R. Gris
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Matapozuelos, Castrodeza, Siete Iglesias de Trabancos, Torrecilla de la Orden, Villabrágima, Tordehumos, Laguna, Tudela y Sardón del Duero tienen problemas de agua corriente

Los Bomberos de la Diputación suministran actualmente agua a seis municipios. - Foto: El Día de Valladolid

Las intensas lluvias que se han registrado en la provincia durante el último mes han provocado problemas de consideración tanto en las tierras de labor como en viviendas de diversos pueblos de la provincia. El riesgo para las infraestructuras ha sido continuo desde el fin de semana, pero ahora las incidencias van un poco más allá. Nueve pueblos han llegado a desaconsejar el consumo de agua corriente por los altos niveles de arsénico, nitratos o turbiedad, según diversas fuentes consultadas por este periódico.

En concreto, estos altos niveles de arsénico, nitratos y sulfatos se han registrado en aquellos municipios  cuyo suministro de agua está a expensas de pozos realizados mediante sondeos, ya que el nivel ha subido tanto como consecuencia de las precipitaciones que han aumentado los niveles de arsénico por encima de lo permitido para consumo humano. «Ayer (por el miércoles) nos enviaron los últimos informes sobre el agua y hemos visto que no se podía beber. Hemos emitido un bando para desaconsejar el consumo a todos los vecinos y no sabemos exactamente cuándo se podrá revertir la situación», indicó ayer el alcalde de Matapozuelos, Conrado Íscar.

Depósitos. En concreto, los Bomberos de la Diputación están suministrando en la actualidad agua debido a los problemas de contaminación a Castrodeza, Siete Iglesias de Trabancos, Torrecilla de la Orden, Villagrágima, Tordehumos y hoy mismo comenzarán con Matapozuelos. «Gracias a un aljibe y al suministro de Bomberos podremos tener agua, pero no se puede utilizar ni para beber ni para cocinar. Mañana esperamos tener aquí los depósitos de los efectivos de la Diputación», indicó Íscar. «El presidente me ha llamado hoy (por ayer).

En el caso de algunos pueblos, como Villabrágima y Tordehumos, el suministro por parte de los Bomberos no ha sido provocado por las últimas lluvias, sino que se viene registrando desde hace tiempo. «Nosotros llevamos unos 14 meses con problemas que van y vienen. A los cuatro meses de aparecer nos dijeron que ya estaba bien y quitamos los depósitos, pero ahora ya los tenemos de forma permanente», indicó el regidor de Villabrágima, Víctor José Arce, quien apuntó que no se solventará su problema hasta que no estén terminadas las obras del servicio mancomunado con Medina de Rioseco. «Nos han dicho que estarán terminadas en torno al mes de junio de este año», indicó.   

Pero además de estos problemas en los municipios que se suministran por pozos, el alto nivel de los ríos ha ocasionado problemas a otro tipo de municipios. Es el caso de Laguna de Duero, quien también mandó un correo a los medios de comunicación ayer para anunciar que debido a las condiciones meteorológicas e hídricas, el agua de suministro del municipio llegaba con un elevado grado de turbiedad y carga en suspensión.

Laguna de Duero. Estas circunstancias complicaron y ralentizaron el proceso de potabilización del agua, haciendo que el suministro no presente la calidad deseada en cuanto a su transparencia. «Hemos tenido también algunas averías que han hecho que tengamos estos problemas. Eso sumado al alto nivel que lleva el río ha ocasionado los problemas que estamos teniendo», manifestó el alcalde de la localidad, Luis Minguela, quien indicó que el agua de era totalmente potable, aunque sí manifestó que era conveniente evitar su consumo en el caso de que saliera «demasiado turbia». «No ocurre en todo el pueblo, sino que solo llega turbia en algunas casas», indicó.

En ese sentido, pidió colaboración a los vecinos para que sean más «cuidadosos» en el consumo de agua, ya que el ritmo de potabilización es menor. «No sabemos cuánto tiempo podremos estar así. Nos lo tendrán que ir diciendo los técnicos».

Además, indicó que otros dos pueblos que se sirven del agua del río Duero para su consumo habían tenido problemas de turbiedad en el agua; Sardón del Duero y Tudela de Duero. En el primero de estos pueblos, las incidencias se habían producido de forma más general afectado a buena parte del pueblo, mientras que en el caso de Tudela sólo había afectado a unas viviendas. «En este caso casi no se puede contar porque se ha producido de forma testimonial».

De igual forma y aunque una parte de la ciudad también se nutre del Canal del Duero para el consumo humano, es improbable que estos problemas de agua corriente lleguen a la capital debido a que la depuradora de Valladolid es «más moderna» y es capaz de  limpiar el agua sin problemas.