Un objetivo claro. Solventar los malos olores existentes en los barrios de la zona oeste de Valladolid. Los vecinos de esta parte de la ciudad llevan años soportando pestilencias con distintas procedencias que están cerca de solventarse. El Ayuntamiento de Zaratán y la Junta de Castilla y León han elaborado un convenio de colaboración para afrontar la construcción de un colector desde la parte alta del municipio que recoja sus aguas residuales y conecte con la Estación Depuradora de Aguas Residuales (EDAR) de Valladolid y evitar así que se viertan de forma directa al Arroyo Madre que atraviesa parte de la ciudad, uno de los focos de malos olores en la capital.
Este acuerdo de colaboración aún no se ha firmado y quedan pendientes unos flecos en la negociación entre ambas administraciones para su rúbrica. Para limar estas pequeñas asperezas, el consejero de Fomento y Medio Ambiente, Antonio Silván, y el alcalde de la localidad, José Luis Revuelta, mantendrán mañana por la tarde un encuentro para intentar llegar a un consenso y fijar la ficha de la firma del convenio.
A falta de concretar los porcentajes exactos, el proyecto para la construcción del nuevo colector tendrá un coste cercano a los tres millones de euros. El Ayuntamiento de Zaratán tendría que sufragar el 30 por ciento del coste de la obra, mientras que la Junta de Castilla y León pagaría el 70 por ciento restante. «El colector bajaría de forma paralela al Arroyo Madre y con esta obra se evitaría que las obras residuales del municipio se vertieran directamente al caudal», destacó el regidor de Zaratán.
Este nuevo colector comenzaría en la parte alta del municipio para dar servicio a las urbanizaciones y atravesaría la localidad para recoger también las aguas tanto del centro comercial Equinoccio como de los polígonos industriales de la localidad. Discurriría por el término municipal de Zaratán hasta llegar a los barrios de la zona oeste de Valladolid siguiendo en paralelo al Arroyo Madre, una de las fuentes de malos olores de la capital.
El colector conectaría con la red de saneamiento de la capital en el barrio de Villa del Prado y desde este punto se depuraría como el resto de las aguas residuales de la ciudad. «El último tramo del colector estaría dentro del término municipal de Valladolid», apuntó Revuelta.
El Ayuntamiento de Valladolid también se ha mostrado favorable a este proyecto. La semana pasada se celebró una Comisión de Medio Ambiente y el concejal del ramo, Jesús Enríquez, informó sobre la firma inminente del convenio y mostró su satisfacción en este sentido, ya que se acabará con el problema de los malos olores que durante años se vienen registrando en al parte oeste de la capital.
Evidentemente, una vez que la obra esté finalizada y sea en la EDAR de la capital donde se depuren las aguas de Zaratán, el municipio tendrá que pagar una tasa anual a la capital por este servicio. «Es normal y nosotros ya contamos con que tendremos que pagar una tasa al Ayuntamiento de Valladolid», destacó el regidor de Zaratán.
Dos puntos más. No obstante, una vez que esté concluida la obra no terminarán los problemas de malos olores en la ciudad. En la Comisión de la semana pasada, Jesús Enríquez apuntó que también llegan hedores procedentes del vertedero municipal (aunque en menor medida que en años pasados) y de las labores de abono que realizan los agricultores en las tierras de cultivo cercanas a las ciudad.