Los aeropuertos de Castilla y León registraron en 2015 el primer incremento de pasajeros de los últimos cuatro años, con un total de 288.972 usuarios. La cifra de viajeros creció un 0,8 por ciento el pasado año, con 2.284 más, gracias a la fuerte subida anotada por los aeródromos de León y Salamanca, que compensó los descensos que se contabilizaron en Burgos y Valladolid, según los datos publicados hoy por Aena Aeropuertos.

En ese sentido, las cuatro bases aeroportuarias de la Comunidad lograron un incremento de pasajeros mucho menor al del conjunto de la red de Aena, que fue del 5,9 por ciento, hasta superar los 207,4 millones. Este aumento es el primero que se produce desde el registrado en 2011, cuando terminó el año con 620.933 usuarios, frente a los 562.836 de un año antes. Desde entonces, el paso de usuarios fue descendiendo hasta los 473.254 en 2012; los 325.910 de 2013 y los 286.688 de 2014.

Por tanto, los cuatro aeropuertos fueron utilizados por un número similar de pasajeros que los contabilizados el pasado año y en 2003. Esta cifra contrasta con los 739.849 de 2007 la cifra más alta desde el año 2000, aunque no tenía actividad el aeropuerto de Villafría (Burgos). Desde entonces, el número de viajeros comenzó a reducirse a medida que la crisis se agravaba, cayendo hasta los 676.012 en 2008 y los 541.713 de 2009. A partir de ese año, la mejoría económica hizo que el tráfico de pasajeros aumentara ligeramente en la Comunidad hasta los 562.836 de 2010 y los 620.933 de 2011.

La irrupción de la segunda recesión, la supresión de vuelos y la desaparición de algunas compañías ha provocado que los viajeros se hayan reducido a menos de la mitad. Está situación está provocada, sobre todo, por la caída libre del número de viajeros de la base de Villanubla (Valladolid), donde el total de 2015 se quedó por debajo de los 300.000 usuarios. También incidió el frenazo del aeródromo burgalés de Villafría, que había iniciado el pasado año un importante desarrollo.

Por tanto, las instalaciones burgalesas anotaron un retroceso en 2015 del 58,44 por ciento, hasta los 8.986 viajeros, 12.637 menos que en 2014. También la terminal vallisoletana registró una caída del 2,37 por ciento, con la pérdida de 5.290 viajeros, lo que deja la cifra en 218.293, similar a la registrada en 2003. Por el contrario, el aeropuerto de La Virgen del Camino (León) contabilizó 38.680 viajeros, un 67,21 por ciento más, con 15.547 usuarios más que en 2014, si bien se trata de un registro muy inferior a los 161.705 de 2007.

De la misma forma, la pista de Matacán (Salamanca) fue utilizada para viajar por 23.013 viajeros, un 25,42 por ciento mas que en 2014, con 4.664 viajeros más. Este aumento de las instalaciones salmantinas está vinculado con las 8.069 operaciones contabilizadas, un 47,08 por ciento más que las 5.486 de un ejercicio antes. También crecieron en León un 34,93 por ciento hasta las 1.885 y en Valladolid, un 5,95 por ciento, hasta los 4.650. Por el contrario descendieron un 15,1 por ciento en Burgos, con 2.063.

En conjunto, las cuatro bases gestionaron 16.667 movimientos de aeronaves en sus pistas, frente a los 13.703 de 2014, lo que supone 2.964 más, un 21,6 por ciento. Un ejercicio más, solo el aeropuerto de Valladolid movió mercancías, con 71,5 toneladas, un 229,1 por ciento más que en 2014.

Diciembre

Respecto al último mes del año, el tráfico aéreo en la terminal de Valladolid creció un 7,3 por ciento, hasta los 12.517, mientras en León el aumento fue del 24,4 por ciento, hasta los 2.562. Por el contrario descendieron un 66,1 por ciento en Burgos hasta los 296 usuarios y un 86,7 por ciento en Salamanca, con 141. Las operaciones se situaron en Matacán en las 409, un 91,1 por ciento más; en Villanubla, en 256, un 21,9 por ciento más; en Villafría, en 125, un seis por ciento menos, y en La Virgen del Camino, en 108, un 12,5 por ciento más.